La Paz, Baja California Sur.- El gobernador de BCS, Carlos Mendoza Davis, evitó cuestionamientos sobre la controversia del hijo del titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Héctor Jiménez Márquez, quien cobra 2 salarios en el gobierno federal y estatal, con una plaza administrativa en una secundaria de Loreto y como director del Gimnasio de Usos Múltiples (GUM) en La Paz, respectivamente.

En respuesta para El Independiente, afirmó que esta carpeta de investigación se encuentra en competencia de la Contraloría General del Estado (CGE), por lo que dijo que será su titular, Sonia Murillo Manríquez, será quien determine si existió un conflicto de interés, aunque adelantó que si el secretario de educación no contrató a su hijo, no existe irregularidad.

“Está en estudio por parte de la contralora, yo así lo he instruido y estamos en la espera de las conclusiones que ella mande […] no soy yo quien habrá de decirlo, habrá de decirlo la contralora, cuando tenga la información total de qué fue lo que pasó y cómo sucedió, con muchísimo gusto les daré mi opinión”, expuso el gobernador.

“Si él [Héctor Jiménez] fue el que lo contrató sí [hay conflicto], si no, no, pues ni modo que no tenga derecho a trabajar su hijo, claro”, agregó Carlos Mendoza.

“Todo tranquilo”, respondió por su parte Héctor Jiménez Márquez, titular de SEP, al ser cuestionado sobre la reacción del gobernador, después de que se diera a conocer a través de redes sociales la controversia protagonizada por su hijo Ángel Isaac, e incluso refirió haber reconocido el respaldo de su jefe inmediato en la administración.

 “[El respaldo del gobernador] así lo he sentido, no hay un tema […] todo tranquilo, lo que me ha pedido es dar respuesta apegado a la ley y nosotros le hemos explicado el tema […] seguimos con la agenda de giras educativas, nos va muy bien en los centros, veo al gobernador lleno de satisfacción por todas las gestiones que él hizo, que se están cristalizando”, aseguró.

Reconoció que el procedimiento administrativo por el presunto nepotismo se debe atender, pero también se dijo a favor de “escuchar a la sociedad” que ha mostrado desaprobación ante el hecho, por lo que dijo que como todo funcionario público, deberá tomar nota de las cosas “que ya no quiere la sociedad”, pero que se deben mencionar y además, atender conforme a derecho.

Negó que su antigua relación de confianza con la hoy contralora general, Sonia Murillo Manríquez, pueda afectar el proceso y aseguró que en todo caso, la Auditoría Superior de la Federación (ASF), se hará cargo de señalar cualquier irregularidad que pudiera pasarse por alto.

“Estamos muy tranquilos en el tema administrativo hemos respondido y estamos en espera de que contraloría de sus resultados […] [la antigua relación con Sonia Murillo] también la he valorado, pero creo que hoy los diputados también dieron una salida, que se iba a mandar a la ASF el tema, entonces creo que por ahí se puede aclarar”, dijo.