La Paz, Baja California Sur.- La violencia ha repuntado en Baja California Sur (BCS) desde la noche del 31 de julio del 2014, cuando 3 personas fueron asesinadas a disparos en la carretera a Los Planes. Desde ese día la historia cambiaría para la media península. 

En 3 años de violencia constante para BCS, alrededor de 892 personas han perdido la vida en distintos hechos de alto impacto en los 5 municipios. 

Aproximadamente 500 de las personas que han sido asesinadas en estos 3 años y 3 meses, se han reportado en el municipio de La Paz; 368 en Los Cabos y otros casos en Mulegé, Loreto y Comondú que han marcado una advertencia de la violencia que se puede desatar en esos sectores. 

Las autoridades del gobierno del Estado en el 2014, cuando Marcos Covarrubias todavía era el mandatario de la media península, rápidamente señalaron que estos hechos de alto impacto estaban ligados al crimen organizado. Se habían acabado “los hechos aislados”. 

Desde julio del 2014 hasta el 8 de septiembre del 2015, la administración de Marcos Covarrubias registró cerca de 164 víctimas de homicidios que fueron atribuidos al crimen organizado; Más del 90 por ciento de estos casos se habrían reportado en La Paz. 

Ese 10 de septiembre del 2015, Carlos Mendoza Davis tomó protesta como gobernador de Baja California Sur. Esa noche, un hombre fu ejecutado en las afueras de una tienda de venta de cerveza en la colonia El Calandrio, como una señal de que la tarea que se le venía encima no sería una enmienda sencilla. 

Entre el 8 de septiembre del 2015 y el 12 de noviembre del 2017, alrededor de 728 personas han sido asesinadas. Este periodo marca la administración de Carlos Mendoza Davis. 

Los Cabos y La Paz son los municipios más afectados por esta ola de violencia, al grado de que Estados unidos ha girado ya diversas alertas de viaje para advertir a sus ciudadanos sobre el riesgo que hay en visitar estos destinos de BCS. 

Las alertas de viaje por parte de Estados Unidos han traído consecuencias, principalmente para Los Cabos, donde la Asociación de Hoteles reveló que hay 35 mil habitaciones canceladas por esta razón, lo que ha dejado pérdidas por 220 millones de pesos. 

Hasta el 31 de diciembre del 2016, la media península reportaba 383 ejecuciones aproximadamente. Entre el 1 de enero y el 10 de noviembre del 2017, se han registrado cerca de 509 homicidios atribuidos al crimen organizado. 

En estos 3 años, alrededor de 80 mujeres han sido asesinadas. El número podría ser más grande, debido a que la identificación de decenas de cuerpos sin vida, nunca fue dada a conocer por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). 

Decenas de personas han denunciado que sus familiares fueron asesinados por equivocación. La muerte del ciclista, Ernesto Núñez, y del zapatero, Alberto Rojas, en la balacera ocurrida el 6 de noviembre del 2016 en la Llantera Marrufo es de los casos que mayor eco mediático han causado. 

De acuerdo con información corroborada a través de boletines de la PGJE y en conferencias de prensa del Grupo de Coordinación de Seguridad, 9 niños han sido asesinados entre septiembre del 2014 y octubre del 2017. 

Para contrarrestar la ola de violencia que ha repuntado, aún más, este año, las fuerzas armadas con instrucciones de la federación han desembarcado y aterrizado a los municipios de La Paz y Los Cabos. 

Carlos Mendoza Davis anunció a mediados del 2017, la llegada de mil efectivos de la Secretaría de la Marina (Semar), Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). La Gendarmería Nacional, así como la Policía Federal también llegó en apoyo. 

En medio del segundo informe de gobierno, llevado a cabo el 11 de noviembre del 2017, Mendoza Davis informó sobre la llegada de otros mil efectivos de las fuerzas armadas. El Estado contribuirá con proveer instalaciones para los elementos. 

La promesa sigue vigente: “la tranquilidad regresará a Baja California Sur”, aseguran las autoridades del gobierno del Estado, quienes han señalado que el tema del crimen organizado es “complejo” y no se puede solucionar de un día para otro. 

Los ciudadanos se han manifestado, en diversos sondeos publicados por este matutino, que se sienten temerosos y paranoicos, mismos que han dicho que no se sienten seguros en las calles de La Paz o de Los Cabos. 

La seguridad sigue siendo una asignatura pendiente; la violencia, lo más importante a resolver según las voces de quienes le dieron autorización a Carlos Mendoza, a través del voto, de administrar a Baja California Sur.  “Yo tengo la fórmula para acabar con la delincuencia” aseveraba dentro de sus promesas de campaña el hoy mandatario estatal.

Muere un periodista

En abril de este año, el experimentado periodista Max Rodríguez, fue asesinado a mansalva cuando se dirigía a un centro comercial a realizar compras acompañado de su esposa.

Hasta el día de hoy no sea juzgado a nadie por este homicidio. Max Rodríguez fue reportero de policiaca del Blog Colectivo Pericú y escribía una columna para el mismo colectivo


Anterior a esto el reportero de policiaca del municipio de Los Cabos Julio Omar Gómez dos veces fue abatido a balazos para arrancarle la vida, sin cumplir el objetivo, motivo por el cual se tuvo que retirar a vivir a otro estado.