· Acertada medida del acalde paceño Armando Martínez de buscar mecanismos de recuperación de la cartera vencida que es de más de 500 mdp · Enorme rezago en el pago de impuesto predial se registra en el municipio de La Paz · Las reacciones en contra pretenden mantener vigente la cultura del no-pago
El ayuntamiento de La Paz que
encabeza Armando Martínez Vega, ha desplegado una estrategia para tratar de
recuperar poco más de 500 millones de pesos que se tienen de cartera vencida
del impuesto predial de ciudadanos que no han pagado esa contribución desde
administraciones anteriores al año 2014.
Esa medida se pretende aplicar,
en esta ocasión, mediante la utilización los servicios externos de algún
despacho o empresa adecuada para realizar este servicio sin que para ello se distraiga
al escaso personal con el que se cuenta en las oficinas propias de recaudación
del Ayuntamiento paceño.
Obviamente se registraron
reacciones en contra principalmente por quienes de alguna manera durante años han
evitado este pago por razones diversas, aunque vale decir que quedó en claro
que muchos de los opositores a esta medida se sintieron afectados por la
posibilidad de que ahora sí se verían obligados a pagar este impuesto.
La simple idea causó
nerviosismo a quienes han hecho caso omiso durante muchos años a esta
responsabilidad tributaria.
Sobre todo de quienes han
especulado con la propiedad o que han generado algún tipo de desarrollo al amparo
de la relación política con anteriores administraciones municipales y que con el
paso del tiempo no han cumplido con este pago.
Para nadie es un secreto que
los ayuntamientos del país y de la entidad cuentan con recursos limitados para
atender sus necesidades y en el caso de La Paz, no es la excepción, aunque está
claro que esta circunstancia no ha sido pretexto para no cumplir con el otorgamiento
de los servicios públicos municipales básicos.
Por supuesto que el momento histórico-político
en que el que se pretende aplicar esta medida incrementa el grado de polémica y
de reacción de diversos grupos y adversarios políticos, sin embargo, recuperar
la cartera vencida es prácticamente indispensable y ello va a generar
reacciones en contra, sea cual sea el momento en el que se aplique.
Luchar contra la cultura del
“no-pago” que paradójicamente se observa más entre ciudadanos que cuentan con
recursos económicos para pagar es definitivamente todo un reto, pues las
personas con menos recursos económico suelen estar más preocupados por estar al
corriente con esta responsabilidad que quienes pueden pagar y que por contar con
amistad o relación política del pasado se ha acostumbrado a no cumplir con su
impuesto predial.
No se requiere tener mucha astucia
para observar claramente a quienes se oponen al cobro de este impuesto para entender
que lo que menos les importa, es el supuesto interés malicioso oculto en esta
medida de contratar servicios externos para eficientizar la cobranza del
impuesto predial.
Otras instituciones han
contratado servicios externos de seguridad, limpieza u otros servicios, por lo
que no debe extrañar que algo similar se haga para establecer mediante una
empresa o institución externa esta recuperación del referido impuesto.
Por supuesto los controles, la
transparencia y la vigilancia adecuada de estos recursos debe estar, sin lugar
a duda, garantizada.
En ello radicará definitivamente
el éxito o el fracaso de esta acertada y necesaria medida que promueve el
acalde paceño Armando Martínez, para inyectar al ayuntamiento dinero fresco a
las arcas municipales.
¿No le parece así amable
lector?