La Paz, Baja California Sur (BCS).- El quitar diputados plurinominales y eliminar el financiamiento a partidos para apoyar a damnificados de los sismos en el centro y sur del país como pretende el Partido Revolucionario Institucional (PRI) es "una trampa" que llevaría al totalitarismo y al cacicazgo, afirmó el diputado local petista Camilo Torres Mejía. 

"Es una trampa que quieren hacer. En el sistema político mexicano, si hoy no hubiera plurinominales, el PRI tuviera cerca de doscientas veinte o doscientas treinta curules, de las trescientas, no habría ninguna representación de la ciudadanía", dijo Torres Mejía, en entrevista con Diario El Independiente. 

Recordó que los plurinominales son los que dan representación a la ciudadanía a través de los partidos y que "si alguien se ha caracterizado por ser levanta dedos son los priistas, históricamente hablando. Es una trampa del PRI", consideró. 

Torres Mejía puso de ejemplo los esfuerzos del propio presidente Enrique Peña Nieto por eliminar 100 diputados plurinominales, propuesta que fue rechazada porque con ello se negaría un intercambio de ideas o una negociación entre los diferentes proyectos políticos, lo que haría caer al país en el totalitarismo. 

Para no ir más lejos, dijo que en el caso del Congreso del Estado, el Partido Acción Nacional (PAN) tiene más de dos terceras partes de los votos por lo que no requiere de negociar para aprobar inclusive reformas constitucionales. 

"Investigadores y expertos de la academia han estado hablando cada vez más de esta situación, y lo absurdo que sería algo de este tipo" a nivel nacional, consideró. 

"Si no hubiera recursos públicos, pues el cacique del pueblo es que va a andar poniendo a los presidentes municipales, a los diputados. O el narco, una serie de fuerzas oscuras serían las que pondrían a la clase política", advirtió a este matutino.

Criticó que se presenten propuestas de forma muy superficial, sin un debate ni análisis de fondo y dijo que el apoyo a dichas medidas visto en redes sociales puede obedecer al accionar de redes pagadas por el gobierno que buscan influir en el ánimo del ciudadano. 

Para hacerse de recursos, el gobierno federal bien puede dejar de condonar impuestos a las grandes empresas privadas, como las de refrescos que deben 60 mil millones de pesos, o las mineras canadienses que deben 20 mil millones de pesos, afirmó. 

"Están utilizando el sismo con fines electorales, sino con fines de meter un sistema altamente totalitario", finalizó.