La compañía Energy System dio algunos tips para sacar lo mejor de la cámara de los celulares, que se han convertido en los dispositivos más usados para tomar fotos
MADRID.
Por su rapidez, comodidad y facilidad, el smartphone se ha convertido en uno de los dispositivos más empleados para hacer fotos, a pesar del descontento de los más puristas. El móvil ofrece gran libertad y espontaneidad a la hora de tomar imágenes, pero para conseguir la mejor calidad, es necesario hacer algo más que enfocar y disparar.
La compañía española Energy Sistem ha divulgado a través de un comunicado ocho consejos con los que sacar el máximo partido a la cámara fotográfica del 'smartphone', desde el punto de vista de varios de sus expertos.
Esta función resta mucha calidad a la imagen, por lo que el retocador fotográfico de la empresa Josep Mendieta ha recomendado "acercarse uno mismo al objeto y modificar el encuadre".
Rara vez se podrán producir imágenes realmente bonitas con el flash de un teléfono móvil, así que lo aconsejable es emplearlo solo en entornos muy concretos, como el interior de una discoteca, y optar por el modo nocturno que incorporan muchos 'smartphones' cuando se quiere realizar tomas en exteriores con poca luz.
Mendieta ha explicado que cuando se usa esta función, "los colores se modifican, la imagen se aplana y la iluminación uniforme producida por el destello del flash puede destruir la imagen por completo", ya que el primer plano brillará prácticamente en blanco y el fondo se desvanecerá por completo.
Muchas veces, una imagen que en la pantalla del 'smartphone' parecía buena resulta estar ligeramente borrosa cuando se visualiza en el ordenador o se prepara para editar. La fotógrafa de Energy Sistem Rocío Díaz ha explicado que la mejor forma de evitar la trepidación, que es la vibración producida por la mano, es "utilizar un pequeño trípode, a menos que estemos tomando imágenes bajo muchísima luz". Otra opción es apoyar la cámara contra una superficie firme, como una pared.
La perspectiva de la fotografía puede experimentar un cambio radical con periféricos que se pueden incorporar al teléfono móvil, como es el caso del gran repertorio de lentes del mercado, desde ojos de pez hasta teleobjetivos. "La versión económica es crear tus propios filtros con plástico y rotuladores de colores, y colocarlos alrededor de las ópticas de tu dispositivo", ha recomendado Rocío Díaz.
Las primeras horas de la mañana o cuando va a oscurecer son los mejores momentos del día para tomar este tipo de fotografías. A mediodía, cuando el Sol está más cerca de su posición cenital, las sombras de los rostros son más definidas y duras, lo que afecta negativamente a la imagen.
Tomar fotos en condiciones de muy poca luz a menudo genera píxeles visibles en la foto y a veces hasta anomalías cromáticas. Una solución pasa por convertir la imagen a escala de grises, lo que mejorará la percepción de la fotografía en general.
Nunca pierdas de vista la mayor fuente de luz que dispongas, ya sea el Sol, un foco o una ventana, y colócala siempre frente al objeto o sujeto que quieras capturar. Solo el fotógrafo puede quedarse a contraluz.
Conocidas aplicaciones como Adobe Photoshop Express o VSCO están disponibles en Google Play de forma gratuita. Rápidas y fáciles de usar, permiten dar un toque diferente a las imágenes creando un color único para cada una de ellas con un solo toque de pantalla. Otras 'apps' como Afterlight o Snapseed pueden convertir las fotografías más sosas en una imagen digna de 'likes'.