• Gabriela Cisneros y Andrés Liceaga serán presidenta y secretario general del PRI. Esthela Ponce en caída libre hacia el ocaso de su carrera política. • Se fortalecen las figuras del senador y líder de la CROC, Isaías González y Juan Alberto Valdivia delegado de la Sedesol. • Ahora faltará definir las candidaturas para el proceso electoral de julio del 2018
Finalmente, la mayoría de los
priistas aceptaron una planilla de unidad avalada por su dirigencia nacional en
donde los senadores Isaías González y Ricardo Barroso en acuerdo con el
delegado de Sedesol, Juan Alberto Valdivia, definieron que Gabriela Cisneros
Ruíz y Andrés Liceaga Gómez, funjan a partir de este lunes como presidenta y
secretario general, respectivamente del comité estatal del tricolor.
En este acuerdo impulsado por el
comité nacional del PRI, resultó sin posibilidad alguna de hacer propuestas relevantes,
la diputada Esthela Ponce Beltrán, quien como lo señalamos en este espacio,
efectivamente quedó ante priistas y ciudadanos en general, políticamente
degradada.
Por ello afirmamos que el otrora
poderoso grupo político que en su momento encabezó la exalcadesa paceña, quien
por cierto aún tendrá que sortear su destino judicial ante las más de 20
denuncias que existen en su contra por el presunto desvío de recursos públicos,
seguramente entrará a una etapa de desmantelamiento natural.
En contraparte, el senador
Isaías González se fortalece en el tricolor sudcaliforniano y la figura de Juan
Alberto Valdivia se consolida al interior de este organismo ante la posibilidad
de ser el abanderado en la candidatura al Senado de la República, por supuesto
en primera fórmula frente una Esthela Ponce que podría quizás realizar acciones
para entorpecer la labor política de sus principales adversarios, pero con la
clara realidad de no lograr alguna nueva candidatura.
Así que la demostración de
poder político también en el CEN del PRI, evidenciada otra vez por el senador
Isaías González y la obligada complacencia del también senador Ricardo Barroso,
que es claro testigo del crecimiento de la figura de Juan Alberto Valdivia, deja
como saldo que la gran perdedora de los procesos de renovación de dirigencias
del tricolor en La Paz y a nivel estatal es la diputada Esthela Ponce quien
literalmente recibió un tiro de gracia político con la decisión tomada por la presidencia
nacional que encabeza Enrique Ochoa.
En este acuerdo, incluso se
espera que el nuevo secretario de organización en sustitución del actual Noé
López, sea Bernardo Montiel, uno de los más cercanos y eficientes colaboradores
de Juan Alberto Valdivia, lo que dejaría aún con más claridad el hecho de que
el grupo político de la exalcaldesa paceña, se encuentra literalmente en caída
libre.
La nueva dirigencia estatal
fungirá a partir de esta fecha hasta el 2021 por lo que no solo tendrá la
enorme responsabilidad de procesar las candidaturas para el proceso electoral
del 2018 que inicia este 08 de septiembre, sino además para la sucesión
gubernamental sexenal de ahí la importancia de esta decisión que finalmente tomaron
los priistas este fin de semana.
En el camino por la dirigencia
estatal se quedaron el diputado Joel Vargas y el regidor Jesús Flores, cuyas
plataformas políticas tanto en el Congreso de la entidad como en el cabildo de
Los Cabos, serán de suma importancia para impulsar a un tricolor que desde 1999
no encuentra la senda de la victoria electoral. También Axxel Sotelo, Noé López
y el propio Ricardo Barroso, de igual manera vieron frustrada su pretensión.
Por su parte Anita Beltrán y
la representante del movimiento de mujeres priistas, Fernanda Villareal, ambas
encuadradas en el vapuleado grupo político de Esthela Ponce y que por lo mismo
prácticamente nunca estuvieron ante la posibilidad real de ser las nuevas
dirigentes del tricolor.
Así que una vez que los
futuros dirigentes reciban su constancia como única fórmula registrada, lo más
seguro es que este lunes se defina la fecha para la toma de protesta respectiva
de Gabriela Cisneros y Andrés Liceaga, como presidenta y secretario general,
respectivamente, quienes tendrán el enorme reto de enfrentar electoralmente al
PAN sudcaliforniano, que sin lugar a dudas, es el principal adversario a
vencer.
Ya veremos qué sucede.