· Se empalman en el PRI nombramiento de dirigente estatal candidaturas · El tricolor de BCS ante el serio riesgo de caer a tercero o cuarto lugar en las elecciones del 2018 · El delegado de Sedesol Juan Alberto Valdivia se perfila como una de las mejores opciones de candidaturas al Senado
Conforme transcurren los días,
el tiempo político empieza a ser un peso enorme para los priistas que prácticamente
tendrán que nombrar nuevo presidente estatal junto a sus respectivas candidaturas.
Ambos procesos se empalmarán en
el tricolor que hasta ahora no ha podido salir adelante con la dirigencia
estatal de Edmundo Salgado Cota quien tal vez lo único que seguramente le valdrá
políticamente es haberle cuidado la silla al senador Ricardo Barroso Agramont
que según dicen en el tricolor puede ser otra vez el nuevo presidente estatal.
Por supuesto que para ello Barroso
tendrá que enfrentar las pretensiones políticas del diputado Joel Vargas, el
regidor Jesús Flores, la exalcaldesa paceña y diputada federal, Esthela Ponce,
así como del senador Isaías González más los que se sumen en las próximas semanas.
Para cualquier partido político
resulta muy complicado empalmar los procesos de renovación de dirigentes y nombramiento
de candidatos que es precisamente el riesgo al que se someterá el tricolor.
Por su parte el PAN por
ejemplo, renovará dirigentes, de acuerdo a sus estatutos, hasta agosto del año
que entra, es decir, dos meses después de las elecciones de junio del 2018, por
eso la actual dirigencia que encabeza Rigoberto Mares, se mantendrá firme durante
los procesos internos de selección de candidatos.
En el PRD es otro el panorama,
pues lejos han quedado ya las intensas competencias internas por lo que ahora
la sombra que amenaza al partido del sol azteca, que dirige Jesús Druk es la de
la renuncia de destacados militantes que podrían sumarse a Morena, como es el
caso de la negligente diputada Rosa Delia Cota Montaño, que no tarda en seguir
los pasos de su hermano Leonel Cota y empezar a ondear la bandera de López Obrador.
Francamente para el PRD y el
PT su participación en el próximo proceso en la entidad, será muy ya que
incluso el partido Morena que ha logrado algún repunte, le resultará muy difícil
convencer a la ciudadanía de que sus principales impulsores, el exalcalde y
exdiputado federal por el PRD, Víctor Castro, y los exgobernadores también por
e partido amarillo, Narciso Agúndez y Leonel Cota, ya han tomado el camino de
la rectitud política.
Dicho de otra manera, por ser
de Morena, ya son políticos “regenerados”
Por ello la presión interna y
externa del tricolor es enorme precisamente porque su expectativa para es la de
tratar de ganar u obtener por lo menos el segundo lugar y con ello colocar a alguno
de sus candidatos como primera minoría.
Para ello primero tendrán que
sacar bien el nombramiento de la nueva dirigencia y luego las candidaturas
donde hasta ahora se perfila con mayor claridad el actual delegado de Sedesol Juan
Alberto Valdivia, que definitivamente es la mejor opción del PRI para postularlo
como candidato al Senado.
Francamente el tricolor no tiene
mucho de dónde escoger si pretende hacer un papel competitivo en las próximas
elecciones de junio del 2018.
Ya veremos entonces cómo salva
el PRI estos dos procesos complicados, nombrar su nuevo presidente del comité
estatal y sus candidaturas, en un lapso aproximado de cuatro meses, es decir de
esta fecha a octubre.
Muchas cosas que hacer, muchas
decisiones que tomar y realmente muy poco tiempo para el PRI sudcaliforniano
que se encuentra como nunca ante la posibilidad de caer hasta un tercer o cuarto
lugar si no toma las decisiones adecuadas.
¿No le parece así amable
lector?
Ya veremos.