Diario El Independiente
Diario El Independiente

Noticias de BCS, México y el mundo.


Hoy es martes, 17 de diciembre de 2024

Realidad de BCS

Como si el asunto fuera cualquier cosa y con el cinismo que caracteriza a algunos representantes del PRI


Otro revés para Esthela Ponce, de nada sirvió refugiarse en municipios de Veracruz, donde el PRI recibió una paliza electoral por parte de la alanza PAN-PRD y MORENA

Insisten simpatizantes de la exalcadesa Ponce Beltrán en apoyar a empresa que exige pagos por servicios no prestados al ayuntamiento

Asiste razón a alcalde paceño, Armado Martínez, al negarse a pagar deudas no reconocidas

Cuántas veces tendrá que decir el alcalde Armando Martínez que en efecto no tiene por qué pagar servicios no prestados de una empresa foránea que está empeñada en obtener beneficios del actual ayuntamiento como parte de la negra herencia de la exalcaldesa y ahora diputada federal, priista Esthela Ponce Beltrán.

Como si el asunto fuera cualquier cosa y con el cinismo que caracteriza a algunos representantes del PRI, Ponce Beltrán a la par de tratar de ignorar las denuncias que pesan en su contra, envía señales hasta donde puede de que lo que se exige al actual ayuntamiento es válido.

Por supuesto el ayuntamiento actual ha señalado en diversas ocasiones que no pagará por servicios que no se han otorgado a la comuna y menos cuando está claro que todo forma parte de una estrategia de presión contra el actual alcalde Armando Martínez Vega.

Más allá de ello, donde la atención se debe de centrar es en el estatus de las denuncias que pesan en contra de la ahora diputada federal Esthela Ponce, a quien por cierto, le fue muy mal en Veracruz, entidad donde en las últimas semanas se refugió para trabajar en favor de los candidatos del ahora vapuleado PRI.

Esthela Ponce se refugió en los municipios de Tuxpan y Poza Rica Veracruz, supuestamente para apoyar al tricolor, pero en esos municipios, como en casi todo aquel estado, el PRI recibió una verdadera paliza electoral, una tunda tanto por parte de la coalición PAN-PRD como por los candidatos de MORENA.

Obviamente ese resultado no le servirá de nada a la exalcaldesa de La Paz, quien además pretende refugiarse en la dirigencia estatal de su partido a través de Anita Beltrán a quien impulsa como futura nueva presidente de tricolor estatal, ante el ya cercano final de su mandato como diputada federal.

Por ello es que habrá que enfocar la atención a la actividad de la diputada federal, que insiste en tratar de mover los pilares de la actual administración municipal que por su parte, sostiene a toda costa que las denuncias interpuestas contra Ponce Beltrán siguen su curso y están vigentes por el presunto desvío de recursos públicos federales.

Mientras esto sucede, el ayuntamiento insiste en que no pagará nada a una empresa que se le intentó habilitar como concesionaria del servicio de alumbrado público, mismo que hasta la fecha la actual autoridad municipal paga puntualmente a la Comisión Federal de Electricidad.

Son dos temas diferentes, pero no separados pues en el fondo están ligados a las pretensiones de lo que resta del grupo político de Ponce Beltrán.

La gente de Esthela Ponce, trata a toda costa de desacreditar a la actual administración municipal paceña con el fin de minimizar y subestimar las denuncias penales que existen en contra de la diputada federal en la PGR, concretamente en la fiscalía especial para delitos cometidos por funcionarios públicos.

Así que este intento fallido por obtener buenos números electorales en el estado de Veracruz se suma a la adversidad que ahora experimenta la diputada Esthela Ponce quien en su momento gozó de cabal salud política y que hoy por hoy se ha convertido en una de las priistas más desacreditadas del momento.

Sumida en una terrible desesperación, se espera que la exalcaldesa regrese a esta capital a tatar de obtener algo en la repartición de posiciones que habrá en el tricolor luego de las renuncias de destacados militantes que han optado increíblemente por sumarse a las filas de Morena y apoyar las propuestas que hagan los exgobernadores Leonel Cota y Narciso Agúndez.

Solo falta que en su desesperación Esthela Ponce haga alianzas de facto con los morenistas sudcalifornianos a través de su amigo Leonel Cota, con tal de hacerle la vida pesada al alcalde Armando Martínez, quien hasta ahora ha sabido llevar la defensa jurídica adecuada contra una empresa apoyada por la pasada administración de Ponce Beltrán que intenta absurdamente, a como de lugar, obtener beneficios económicos por servicios no prestados.

Así que el último boleto político de Esthela Ponce se agota y se agota rápido, por lo que no le extrañe que aparezca de nuevo con la ya conocida cara del cinismo, que por desgracia algunos integrantes de la clase política del viejo PRI han sostenido.

Cinismo que a querer o no, la ciudadanía rechazó una vez más con su voto adverso en las elecciones del pasado fin de semana.

Por supuesto, las presiones de lo que resta del grupo político de Esthela Ponce hacia el alcalde Armando Martínez, continuarán por lo que resta de su administración.

Ya veremos.