La Paz, Baja California Sur.- A pesar de las verificaciones que realiza la Comisión Estatal de Riesgos Sanitarios (Coepris) para evitar la proliferación de enfermedades gastrointestinales, estas siguen disparándose en el estado, de acuerdo con las cifras más actualizadas de la Secretaría de Salud (SSA) federal.

Según el boletín epidemiológico número 22 del año, que incluye casos del 22 de mayo al 3 de junio. en todo el 2016 se registraron 101 casos de intoxicaciones alimentarias. Sin embargo, en lo que va del año se han registrado 205 casos, 93 de ellos en hombres y 112 en mujeres.

En el caso de infecciones intestinales por protozoarios, presentes en la mayoría de los casos en frutas y verduras contaminadas, mientras que en 2016 hubo 26 casos confirmados, en lo que va del 2017 ya son 76 los casos, 34 hombres y 42 mujeres.

En tanto, los casos de ascariasis, que se deben en su mayoría a consumir alimentos o bebidas contaminados, mientras que en 2016 hubo 22 casos registrados, hasta el 3 de junio eran ya 32 casos, 20 de ellos en hombres y 12 en mujeres.

En tanto, en casos de enfermedades infecciosas intestinales en general, que incluyen las que están dentro de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10) Volumen 1 de la Organización Panamericana de la Salud, en 2016 hubo 16 mil 11 casos, mientras que hasta el 3 de junio eran 23 mil 549 casos, 11 mil 1 en hombres y 12 mil 548 en mujeres.

·      Mantiene Coepris veda tras marea roja

Desde el pasado 9 de junio, la Coepris mantiene una veda sanitaria en la Bahía de La Paz debido a la presencia de toxinas en el mar, un fenómeno conocido como marea roja.

La Coepris ha recomendado a la población evitar el consumo de moluscos bivalvos, los que tienen doble concha, como son las almejas, ostiones, mejillones o callo de hacha, extraídos en la zona, aunque ha subrayado que no existe riesgo sanitario por el consumo de pescados y mariscos.

Según la comisión, el hormigueo o entumecimiento de labios es una de las reacciones más comunes que se presentan media hora después de consumir un molusco bivalvo contaminado por marea roja, así como sensación de picazón en los dedos de pies y manos.