El líder de la sección paceña del SUTSPEMIDBCS se deslindó de ser autor de presuntas amenazas recibidas por una sindicalista que lo acusa, al asegurar que existen funcionarios de gobierno y sindicales que promueven conflictos y desunión en el gremio

La Paz, Baja California Sur.- Eduardo Valdez, secretario general de la sección paceña del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado, los Municipios e Instituciones Descentralizadas de Baja California Sur (SUTSPEMIDBCS), se deslindó de las acusaciones que hiciera en su contra Daniela Alejandra González Amador, asesora jurídica del propio gremio, quien asegura haber sido amenazada y procedió a interponer una denuncia judicial, dejando ver que antiguos líderes sindicales y funcionarios gubernamentales fungen como “titiriteros” para causar conflictos entre la burocracia, desunirla y controlarla.

Hay que recordar que este fin de semana González Amador denunció en redes sociales amenazas y daños a su patrimonio y acusó a Luciano de la Peña León, dirigente suspendido del SUTSPEMIDBCS; a Freddy Hernández Martínez, árbitro representante ante el tribunal del sindicato; y a Eduardo ValdezM de ser autores intelectuales de las amenazas, sin embargo el secretario paceño se dijo inocente y afirmó que no mantiene ninguna relación laboral, personal o sindical con la abogada, por lo que le sorprende ser señalado.

Valdez relata que Luciano de la Peña la coloca como asesora jurídica una vez que éste toma el cargo de secretario estatal del SUTSPEMIDBCS y luego de que ella desempeñara el mismo puesto durante el servicio del líder anterior, hoy séptimo regidor del Cabildo de La Paz, Maximino Iglesias Caro, y no supo de ella, indica, hasta un año después, en la convención sindical de Loreto, donde acusaría a De la Peña León y a Hernández Martínez de recibir sobornos para aplazar negociaciones a favor de burócratas de Comondú.

“Todo mundo sorprendido porque tanto Luciano, como Freddy y ella se hicieron señalamiento mutuos. Nosotros éramos espectadores […] Fue asesora de Maximino Iglesias Caro cuando fue dirigente estatal, después Luciano la nombra asesora jurídica también de él, y hoy lo único que sé […] es que es funcionaria del Ayuntamiento de La Paz y que cobra muy bien y tiene un puesto de asesora de la séptima regiduría del Ayuntamiento de La Paz […] Ella denunció un supuesto soborno o que le pedían dinero a unas personas, y Freddy le decía ‘pues tú sabes de eso’, porque eran socios y tenían un bufet”.

Estos hechos, evidencia Eduardo Valdez, son muestra de que el SUTSPEMIDBCS es un ente de negociaciones políticas, lo cual reprueba, adelantando que existen 2 batallas sindicales a emprender tras destapar algunas cloacas, una con el Ayuntamiento de Comondú, donde a los trabajadores “no les han pagado ninguna negociación desde el 2015”, lo que ya suma alrededor de 12 mil 500 pesos de adeudo por persona, tratándose de más de 900 empleados, siendo esta será la primera prueba del líder interino del Sindicato de Burócratas tras la destitución de Luciano de la Peña, Sergio Delgado Vargas, quien advierte que de no encontrar soluciones antes del 31 de mayo los burócratas convocarán a un paro estatal, pues de este caso “es de donde se derivó el señalamiento a Luciano y su destitución […], ahí nació todo”, dice Valdez.

Mientras que la segunda lucha es por modificar el artículo 32 de la ley de los burócratas, la cual durante la administración de Maximino Iglesias fue reformada para negar que en los pliegos petitorios se exijan aumentos salariales superiores a los marcados anualmente por la inflación. 

“A mí no me gusta la hipocresía y aquí donde estoy me costó llegar seis años, seis años que batallé contra un régimen que nos estaba perjudicando”, dijo para concluir Eduardo Valdez. “Han utilizado al sindicato como botín político […] Nos toca luchar con una herencia de una negociación que va en contra de la ley, y aquí está el artículo 32 que decimos, y lo dice muy claro, ‘renunciamos a cualquier tipo de negociaciones en lo económico’, y que nos vamos a dar por bien servidos con el aumento salarial de diciembre y aumentos a los bonos, y se firmó en la administración de Maximino Iglesias […] Del 2010 a la fecha se nos quitó el aumento al salario que teníamos en julio, que ahí sí se veía reflejado en el bolsillo del trabajador […] Obviamente desde el interior y con otros fines nos atacan, nos señalan, nos calumnian, y pues obviamente nosotros siempre hemos estado al margen […] Siempre se ha utilizado [el sindicato] como botín político, es la realidad, vienen tiempos políticos y van a empezar a meterse. Saben que nosotros llegamos limpios, que no dependemos de ellos […] Los que están atrás de esto, ahora sí que los titiriteros, van a andar candidateándose, y a mí no me interesa, mis aspiraciones son meramente sindicales, yo voy a seguir luchando aquí y si termino mi periodo me regreso a mi área, pero voy a seguir buscando posiciones dentro del sindicato […]  y buscaremos que el líder estatal se elija por todos los trabajadores, no por una minoría […], porque ahorita el líder llega impuesto, por más capacidad que tengan lo impone una minoría o lo impone el gobierno, ¿y qué pasa?, pues no representa, no lucha, simula nada más […] Es una realidad, yo creo que lo que le conviene a la parte patronal es la división y le apuesta a eso, me queda claro que seguiremos cualquier situación que se presente, no tenemos compromisos, lo vuelvo a decir, con nadie, si detectamos que hay autoridad detrás de esto, si detectamos a quien esté, lo voy a denunciar, lo vamos a denunciar porque ¿quiénes serán los afectados? Los trabajadores”.