Ya sabemos que nadie es indispensable en prácticamente ninguna posición dentro de la administración...
• Se amplía expectativa política de Armando Martínez y mejora dinámica interna en el ayuntamiento paceño con los nuevos funcionarios
• La recolección de basura, alumbrado, agua potable y seguridad preventiva se realiza sin contratiempos mayores
• Ni crisis, ni escándalos, hasta mejoró la relación de burócratas con la autoridad municipal
El ayuntamiento de La Paz, que encabeza el alcalde Armando Martínez, inicia una nueva etapa dentro de su gestión con enroques en diversas áreas por lo que lo más seguro es que la dinámica laboral interna mejore y los resultados al exterior sean positivos.
Ya sabemos que nadie es indispensable en prácticamente ninguna posición dentro de la administración pública y para el caso del ayuntamiento paceño, esto ha quedado demostrado una vez más con la salida de Isidro Ibarra quien a pesar de tener bien sustentada (y bien ganada) su salida de la secretaría general de ayuntamiento, solicitó el recurso de amparo, justamente por considerar esta medida injustificada, pero su solicitud le fue negada por parte de la autoridad judicial correspondiente.
Esto demuestra de muchas maneras que el que se haya renovado a secretaría general del ayuntamiento y que ahora estará a cargo de Juan Carlos González Bareño, quien fungía como oficial mayor y este a su vez será reemplazado por el que fuera director de egresos, Jesús Antonio Lucero López, lo que deja en claro que el alcalde Armando Martínez, está empeñado en hacer bien su trabajo.
Obviamente su labor, como la de todos los alcaldes, no es nada sencilla, sin embargo, hasta ahora los servicios públicos a la comunidad, que son indispensables, como la recolección de basura, agua potable, alumbrado público y seguridad, se han prestado sin mayores problemas.
Ahí es donde Armando Martínez ha señalado que está concentrado en atender como una prioridad, además, la relación con los trabajadores del ayuntamiento ha sido equilibrada y respetosa, aunque vale decir que en su momento el sindicato de burócratas estableció su distancia porque no quisieron más interlocución a través del ahora exsecretario general.
Con la expulsión de Isidro Ibarra, del ayuntamiento paceño, se calmaron las aguas al interior de esta instancia, curiosamente, así pasó prácticamente de la misma manera, cuando el ahora exfuncionario municipal, fue separado de la misma posición durante la gestión del entonces perredista exalcalde paceño Víctor Castro Cosió y durante su labor como subsecretario general de gobierno de la pasada administración estatal.
Así que la decisión de cambiar del segundo hombre de abordo por parte del alcalde paceño, es definitivamente una medida además de acertada sana para el ejercicio de su labor y el equilibrio de las fuerzas al interior del ayuntamiento que representa la capital de Baja California Sur.
Políticamente la repercusión es mínima sobre todo si se considera que Isidro Ibarra ha dicho que no pertenece a ningún partido político, lo que deja abierta la posibilidad de verlo en un futuro actuar en organismos políticos antagónicos al PAN que es el partido del cual emana el gobierno del estado la alcaldía paceña.
Por lo pronto la dinámica de ayuntamiento paceño continúa sin mayores contratiempos por lo que las expresiones de supuestas crisis o “escándalos”, resultan verdaderas exageraciones de quienes parecen estar incómodos con la abrupta salida de un isidro Ibarra políticamente acabado.
Armando Martínez se sacudió atinadamente y en el momento justo a Isidro Ibarra quien se había convertido en una especie de lastre político, por lo que ahora el alcalde podrá continuar su vuelo con la carga más ligera, mientras que lo más seguro es que el ahora exfuncionario, se regrese a su antigua actividad de granjero en donde quizás ahí si pueda tener el éxito anhelado.
Así que definitivamente la decisión de Armando Martínez de proponer al Cabildo paceño el despido de Isidro Ibarra, que a su vez fue aprobada por una amplia mayoría (solo tres regidores se abstuvieron en su voto), le abrirá al alcalde paceño, nuevos y más amplios caminos y nuevas puertas en el ámbito político que solo de esta manera podría suceder.
¿No le parece así amable lector?