La otrora cantante del grupo Playa Limbo protagoniza la serie 'Guerra de Ídolos' en la cadena hispana Telemundo, tras 18 'castings' para quedarse con el papel de 'Manara Matamoros'
MIAMI.
La ex vocalista del grupo mexicano Playa Limbo, María León, cumple uno de sus sueños, al protagonizar la nueva teleserie de Telemundo, Guerra de Ídolos, pero admitió que el camino no fue nada fácil, pues tuvo que realizar 18 castings para lograr su primer papel como actriz en la pantalla chica.
León, de 31 años, originaria de Zapopan, Jalisco, quien comenzó cantando cuando tenía siete años en el restaurante de su abuelo en Guadalajara, con el Mariachi Vargas, y luego estudió danza y actuación, admitió que se preparó todo el tiempo para este momento.
“Estoy en shock todavía, pero creo que lo que funcionó es que soy una artista multidisciplinaria que podía tocar un instrumento, que podía cantar y darle lo que el personaje necesita”, dijo la tapatía en una visita a Miami para promocionar la serie que se estrenó esta semana en Estados Unidos.
“Todo esto es un reto para mí, es como si fuera una emoción agridulce (tuvo que dejar el grupo musical Playa Limbo para esta nueva etapa) en un camino desconocido, pero con gente hermosa también con un cúmulo de emociones que me han llevado hasta experiencias al límite”, afirmó.
En la teleserie León da vida a Manara Matamoros, una joven soñadora, que “armada” solo con su guitarra, se encuentra atrapada en medio de las ambiciones de su perverso hermano, Amado Matamoros, un “empresario” mafioso que no dudará en venderla con tal de alcanzar el poder político.
En la teleserie Guerra de Ídolos participan también Alberto Guerra, Alejandro de la Madrid, Juan Pablo Medina y Daniel Elbittar.
“Es una propuesta muy diferente, es una serie musical con música original, que no es un tributo, sino que es una exposición de lo que pasa con los artistas detrás del escenario, en la que se descubre la parte humana de la gente que hemos idealizado arriba del escenario como es que llegan al estrellato”, explicó.
“Los personajes no son típicos, la protagonista no es la buena que sufre y que se victimiza, no son los roles tradicionales y todos los personajes son ricos emocionalmente son multidimensionales que se equivocan muy parecido a la vida real”, subrayó.
“Toda la música está escrita para sus personajes, y la música no viene a sentimentalizar al espectador, sino al personaje mismo y a partir de ahí creo que se va a crear una buena empatía”, agregó.
La producción que se grabó durante seis meses en México, pone al descubierto lo sucio que puede ser el negocio de la música cuando se ve afectada por intereses del bajo mundo y es aquí, donde León demuestra sus dotes en la actuación.
La experiencia como actriz de León antes, era sólo una comedia musical y una película, por eso considera un gran triunfo el hecho de haber sido seleccionada para estelarizar la producción, algo que asegura no fue nada fácil.
“Empecé con un casting y tuve 18 llamados más. En los últimos yo ya me quería morir, y yo ya decía por favor ya díganme que no, ya no aguanto los nervios”, reveló la también guitarrista.
“No fue un proceso fácil pues hubo muchas actrices muy buenas que yo respeto, pero al final creo que Dios quería esto para mí”, concluyó la ahora actriz, al asegurar que seguirá preparándose con clases de actuación en Los Ángeles, California.