Ella dijo "te mataré mientras duermes si vuelves a pegarme". El le miró los ojos y no volvió a dormir tranquilo. Tampoco volvió a pegarle.
El autor de la saga de El capitán Alatriste publicó un mensaje (¿un microcuento? ¿un haiku?) sin más relieve, aparentemente, que su interés literario
CIUDAD DE MÉXICO.
Arturo Pérez Reverte ha sido protagonista de varias broncas épicas en Twitter. Los mensajes del escritor, a veces desabridos, a veces muy directos, siempre polémicos, le han puesto en el centro de la polémica en multitud de ocasiones. La mayor parte de las veces es el propio Reverte el que lleva la voz cantante o quien corrige a su interpelador. Pero el guión de la historia tuitera de Pérez Reverte ha sufrido este lunes un dramático giro de guión.
El autor de la saga de El capitán Alatriste publicó un mensaje (¿un microcuento? ¿un haiku?) sin más relieve, aparentemente, que su interés literario.
Sin embargo, al texto le faltaba algo para estar completo. Y lo más importante: le faltaba algo para ser correcto. Fue un tuitero el valiente que, exponiéndose a la conocida ira dialéctica de Pérez-Reverte, le señaló el error con sorna.
@perezreverte "Él le miró a los ojos" #hecorregidoareverte
De no haber incluido el tuit ese #hecorregidoaReverte, quizás la historia habría sido de otra forma. Pero el tuitero no lo pudo evitar, y Reverte tampoco.
La ira ciega el entendimiento, y ni siquiera Pérez Reverte escapa a esa ley. El escritor patinó y dejó vía libre a su contraparte tuitera para arrearle un zasca ortográfico tan monumental como sencillo.