El PAN no acepta la eliminación del mecanismo que garantiza el financiamiento a la cultura
CIUDAD DE MÉXICO.
Los aspectos presupuestal, fiscal y de fondeo de las actividades culturales se convirtieron anoche en el atorón de la primera Ley General de Cultura y Derechos Culturales, porque el PAN no acepta la eliminación del mecanismo creado para garantizar el presupuesto y financiamiento a la cultura mexicana.
El punto de la discordia es el Título Sexto, identificado como “Del Presupuesto y Financiamiento a la Cultura”, que en el proyecto de dictamen del 20 de abril, estaba integrado por tres capítulos; uno, dedicado a Los Instrumentos de Financiamiento; el segundo, a los Estímulos Fiscales; el tercero, Del Fomento a las Unidades Económicas de Carácter Cultural.
El proyecto final, del 24 de abril, eliminó todo el Capítulo Sexto, por lo que no existen garantías del sustento presupuestal y financiero para la cultura, y fue sustituido por un artículo transitorio que deja en claro que esos aspectos serán decididos por la Cámara de Diputados, en función de las posibilidades presupuestales del país.
Por eso, anoche mismo, durante la comparecencia pública de María Cristina García Cepeda, secretaria de Cultura federal, la senadora panista Mariana Gómez del Campo advirtió que su grupo parlamentario rechaza esta eliminación.
Pero, además, la versión final del proyecto de dictamen también eliminó el Capítulo segundo, que se refiere a las Bases de Coordinación del Sistema Nacional de Cultura, incluido en el Título Cuarto, que se llama “Bases de Coordinación, Atribuciones y Competencias”.
A pesar de este rechazo panista, el priista Gerardo Sánchez, presidente de la Comisión de Cultura del Senado, que es la Cámara de origen, aseguró que es altamente probable que antes del fin de semana México tenga la primera Ley General de Cultura.
“Si llegamos a los consensos el día de hoy (ayer), si no mañana muy temprano (hoy), entonces lo haríamos como una prioridad legislativa de los grupos parlamentarios y, en consecuencia, antes de terminar el periodo tendríamos la primera Ley General de Cultura y Derechos Culturales”, confió.
El Senado concluye su periodo ordinario de sesiones este jueves y la Cámara de Diputados lo hará el viernes; por eso, si el Senado aprueba a más tardar mañana la nueva
Ley, en San Lázaro tendrán tiempo para aprobarla, dado que los diputados federales y los senadores trabajaron juntos, en conferencia legislativa, todo este proceso para crear el marco legal.
Incluso Gerardo Sánchez precisó que en este caso no aplica el Reglamento del Senado, que obliga a las comisiones a distribuir con 24 horas de anticipación los dictámenes, antes de ser aprobados en comisiones, dado que “se trata de una sesión extraordinaria”.
De acuerdo con el proyecto de dictamen que se construyó por consenso entre panistas y priistas, que son las dos únicas fuerzas políticas representadas en la Comisión de Cultura del Senado, el tema del financiamiento a la cultura debía quedar establecido en un “anexo específico” del Decreto de Presupuesto de Egresos de la federación y no podía “ser inferior” al ejercicio del año fiscal anterior, además de que debía incrementarse “cuando menos” en la misma proporción en que se prevea el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
El capítulo eliminado incluía la creación de un fondo concursable para financiar proyectos culturales; regulaba los fondos mixtos y la administración de subsidios, incentivos y donativos que estaban destinados a estados y municipios. Además, regulaba las donaciones, herencias y legados que recibe la Secretaría de Cultura por parte de cualquier institución privada o pública.
El apartado dictaba los lineamientos para el fomento de las Unidades Económicas de carácter cultural, conocidas como empresas culturales. Una de las partes eliminadas en la versión final señala que “la Secretaría de Cultura estimulará el acceso de las micro, pequeñas y medianas empresas del sector económico de la cultura a su padrón de proveedores, a licitaciones y adjudicaciones de servicios, de bienes o productos”.
La dependencia, en conjunto con Hacienda, estaba obligada a realizar acciones de capacitación en los temas contable, fiscal, uso de tecnologías, comercialización de productos, a fin de establecer las capacidades de las empresas del sector económico de la cultura”.
Instala su Consejo Asesor
María Cristina García Cepeda, secretaria de Cultura federal, volvió a insistir en que el recorte de 18.5% al presupuesto destinado para la cultura “es un momento de oportunidad” para la cultura. Al comparecer en el Senado, la funcionaria afirmó que la dependencia trabajará en tres aspectos para hacer frente al recorte: racionalizar el gasto, privilegiar el trabajo transversal y evitar duplicidades.
Justificó al gobierno federal acerca del recorte de dos mil 700 millones de pesos que sufrió la cultura este año en relación con 2016. “Cuando hay recortes, no prioritariamente le toca a la cultura; es una realidad que existen problemas económicos en el mundo”, dijo. La funcionaria tuvo una comparecencia tersa: fue la primera de un secretario de Cultura en el Senado. Los cuestionamientos escasearon. La secretaria volvió a formular las cuatro líneas de acción en las que ha enfocado su trabajo y dijo que una de las acciones que ha llevado en los primeros 100 días de su gestión fue la instalación del Consejo Asesor de la dependencia. Este organismo, que hará recomendaciones y sugerencias en arte y cultura, quedó conformado por Arturo Márquez, Francisco Toledo, Sabina Berman, Ernesto Piedras, José Luis Paredes, Christopher Domínguez Michael, Luis Jaime Cortez y Rosa María Fernández Zamora.
También Claudia Lavista, Arabella González, Graciela Iturbide, Lucina Jiménez, Alejandro Luna, Néstor García Canclini, Eduardo Matos Moctezuma, Enrique Norten, Héctor Aguilar Camín, Diana Bracho, Carlos Amorales y Natalia Toledo. Los integrantes estarán acompañados por instituciones como El Colegio Nacional, El Colegio de México, la Academia de Artes, la Academia Mexicana de la Lengua y el coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, Jorge Volpi.
García Cepeda dijo que en la primera reunión que sostuvo el organismo se planteó la necesidad de hacer un análisis de la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro y revisar si resultó pertinente la implementación del llamado Precio Único; además dijo que en los momentos que vive el país y la cultura en términos presupuestarios, se analizará la viabilidad de algunas de las librerías Educal.