Tras ser expuesto en Berlín y Roma, uno de los caballos de la obra más reciente del escultor mexicano estará en el centro de la capital poblana PUEBLA.
Después de participar en la exposición itinerante Lapidarium, la cual estuvo en 2015 frente a la puerta de Brandenburgo de Berlín, en el marco del 70 aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial, y el año pasado frente al Coliseo en Roma, uno de los caballos que conforman la obra más reciente del artista mexicano Gustavo Aceves llegó a México.
Uno de los caballos colosales, los cuales fueron creados en Pietrasanta, la ciudad del mármol italiana, cruzó el Atlántico para ocupar un sitio de privilegio en el recibidor de un hotel próximo a inaugurarse en el Centro Histórico de la ciudad de Puebla, en cuyos espacios abiertos y cerrados habrá más de mil 100 piezas de arte de autores nacionales y extranjeros.