SAN FRANCISCO. “Hemos secuestrado tu información. Para recuperarla debes pagar 500 pesos”. Mensajes como ése son recibidos por las personas o empresas que han sido víctimas de los cibercrim
“Hemos secuestrado tu información. Para recuperarla debes pagar 500 pesos”. Mensajes como ése son recibidos por las personas o empresas que han sido víctimas de los cibercriminales a través de un ransomware, una técnica de secuestro de equipos que está evolucionando y podría convertirse en una peligrosa arma cibernética.
Al participar en la Conferencia RSA 2017, Aaron Guzman, consultor principal de seguridad en SecureWorks, recordó que el ransomware encripta la información del equipo infectado, lo que permite a los cibercriminales pedir un rescate monetario o, más recientemente, le pide a las víctimas infectar a sus amigos. El que esta sea una forma relativamente sencilla de obtener dinero ha hecho que los ataques sigan al alza. Kaspersky Lab encontró que cerca de un millón 445 mil 434 personas fueron víctimas en el mundo en 2016. Lo que también se traduce en que cada diez segundos una persona era atacada con ransomware y en el caso de las empresas cada 40 segundos. EL CAMBIO Guzman indicó que los cibercriminales están intentando desarrollar nuevas familias de ransomware que se aprovechen del internet de las cosas, es decir, de los refrigeradores y hasta cerraduras que están conectadas a la red. Recordó que en la feria de hackers DefCon 2016 se demostró que es posible infectar un termostato con este tipo de código malicioso. “Imagina que secuestran tu termostato durante invierno, no es muy peligroso, pero sí molesta”, añadió. Los investigadores del Instituto Tecnológico de Georgia han llevado esto un paso más adelante y demostrado el verdadero peligro del ransomware. Durante la Conferencia RSA 2017, el estudiante de doctorado, David Formby, y su tutor, Raheem Beyah, lograron inyectar este tipo de código malicioso en una simulación de una planta de tratamiento de agua. Con esto ganaron el control de los sistemas y pudieron amenazar con cortar el suministro de agua o, bien, envenenarla aumentando el volumen de cloro. El propósito de ambos investigadores es crear consciencia en la industria para elevar las medidas de seguridad, algo que también Gib Sorebo, jefe de estrategia de seguridad de Leidos, consideró necesario porque teme que este tipo de ofensivas en el mundo real pueden tener un impacto crítico, dependiendo de la industria. LOS CULPABLES Anton Ivanov, miembro del equipo de Kaspersky Lab, reveló en un reporte que las personas detrás del desarrollo de ransomware son en su mayoría de origen ruso. Esto porque de las 62 nuevas familias encontradas en 2016, al menos 47 de ellas se pueden ligar a grupos o individuos rusos gracias a la información que dejan en foros ocultos, en los comandos o en el control de la infraestructura. “Los cibercriminales rusos tienen antecedentes cuando se trata de esquemas de ransomware, antes de esta ola hubo otra epidemia entre 2009 y 2011. Miles de usuarios en Rusia y los países cercanos experimentaron ataques que bloqueaban su acceso a los navegadores o el sistema operativo”, relató.