• En las imágenes de una cámara de seguridad de Turquía, se observa cómo se acerca al animal para darle comida y después lo cubre con su ropa para protegerlo de la fuerte tormenta de nieve

MÉXICO.

En momentos donde las malas noticias abundan en Internet, siempre es reconfortante encontrar situaciones que nos recuerdan la bondad de los seres humanos.

En esta ocasión, un video se viralizó por el acto de bondad de un hombre hacia un perro callejero. Las imágenes fueron captadas en la ciudad de Giresun, Turquía, donde hace algunos días cayó una fuerte nevada. En el video de tránsito se observa a un perro callejero, sentado en la orilla de una calle, mientras intenta cubrirse de la nieve. En un momento un hombre aparece en el video, se acerca al animalito, le ofrece de comer y, sorpresivamente, se quita su chamarra y con ella cubre al perro. El video fue compartido en redes sociales y rápidamente dieron con el nombre de esta persona, que sin lugar a dudas demostró que aún hay bondad en el mundo. El hombre de nombre Bülent Kalpakçıoğlu, trabaja en el gobierno municipal de Giresun y declaró que hizo esto porque es lo menos que podía hacer por este ser vivo.

Si no le daba mi chamarra, no podría haber comido con mi conciencia limpia. Mientras nosotros estamos sentados, calientes, dentro de nuestras casas, ellos están afuera en el frío’, relató el ‘héroe’ al sitio web The Dodo.

Gracias a su acción, Kalpakçıoğlu fue reconocido por el alcalde de Giresun, Kerim Aksu, con un certificado especial.

Con esta acción, él da una lección en humanidad. Los animales son nuestros amigos. Amamos a la gente, amamos nuestra ciudad, amamos todas las cosas vivas que son parte integral de nosotros y de nuestra ciudad’, declaró el alcalde en la ceremonia de entrega.

Estos actos de compasión y amor por los perros callejeros se han extendido en Turquía desde hace varias semanas, ya que fuertes nevadas y corrientes frías han azotado al país. En centros comerciales han permitido el acceso en las noches a los perros callejeros para que se resguarden del frío, donde muchas personas los cuidan, los alimentan y los cubren con cobijas. Algunos otros colocan cajas de cartón con cobijas para que se resguarden, y otras tiendas -como Penti en Estambul- permiten la entrada de los animales incluso cuando hay clientes al interior.