CIUDAD DE MÉXICO.

En una semana abrirá sus puertas una nueva librería que comercializará libros tan raros como exquisitos, volúmenes fuera de moda y del circuito comercial que podrían ser la joya de cualquier biblioteca personal. Se llamará La Increíble Librería, estará enclavada en la colonia Roma Norte y abrirá sus puertas el próximo 12 de noviembre, día en que nació sor Juana Inés de la Cruz y se conmemora el Día Nacional del Libro.

Su oferta incluirá primeras ediciones firmadas por Octavio Paz, Jorge Luis Borges, Julio Cortázar y Xavier Villaurrutia, así como grabados de José Guadalupe Posada, libros raros de historia y arte, reproducciones de códices y hasta la colección completa de la Biblioteca del niño mexicano, de Heriberto Frías, con portadas litográficas de Posada. El espacio, que estará ubicado en la calle de Guanajuato 143-C, ha sido ideado por el ilustrador y diseñador Alejandro Magallanes y la editora y librera Selva Hernández, también venderán una meticulosa selección de libros de editoriales independientes y comerciales.

La idea que hemos pensado para esta librería es la de un espacio donde lectores, compradores y curiosos puedan pasar un buen rato y descubrir libros insospechados, quizá atraídos por su belleza, antigüedad o rareza. El chiste es que quien llegue a este lugar pueda encontrar libros interesantes y un lugar que forme parte de su vida”, dice Alejandro Magallanes a Excélsior.

El concepto parece muy simple, reconoce el ganador de la medalla Jozef Mroszczak en la XVI Bienal del Cartel en Varsovia y el premio Golden Bee en la categoría de libro en la Bienal del mismo nombre en Rusia, pero se trata de un proyecto que pone los ojos en esos libros peculiares que todos desean, aunque muy pocas veces pueden verse.

El concepto nació de la pasión que nos despiertan los libros… esos objetos tan añejos como entrañables que a veces hacemos, diseñamos, escribimos, ilustramos o publicamos con editoriales muy queridas, empresas utópicas como ésta, que contribuyen a la cultura lectora o al coleccionismo”, asegura el también ilustrador mexicano.

¿Por qué usar el nombre de increíble?, se le inquiere. “Porque tendrá libros que para nosotros son increíbles. Y ojalá logremos contagiarles nuestro entusiasmo, pues entendemos que un libro es un objeto hecho de papel, encuadernado de cierta forma, impreso con ciertas características… un objeto que ha transitado por el tiempo y ha sido pensado por muchas personas, en esencia, un eslabón importantísimo para nuestra cultura”. ¿Será una librería para público especializado? “Yo espero que sea interesante para todo mundo. Por eso también incluiremos una selección de títulos independientes, comerciales y una sección muy bonita de libros para niños; creemos que será una librería que les sorprenderá”. Y aunque Magallanes reconoce que es un tiempo difícil para abrir una librería, “hacía tiempo que teníamos la idea y ahora la única manera de sostenerla, sin subsidios gubernamentales, será generando gustos. Desde luego, queremos que esta librería sea sustentable porque estamos invirtiendo nuestro dinero, ilusiones y expectativas. Mientras tanto hoy emprendemos esta aventura y nos aventamos, un poco en caída libre… ya veremos en qué momento se abre nuestro paracaídas”.

NO MÁS INFIERNO

La Increíble Librería arrancará con la exhibición de cuatro mil volúmenes que irán creciendo con el paso de los meses, aunque también contará con una cafetería y objetos relacionados con el mundo del libro, comenta Selva Hernández, hija de libreros y editora del sello independiente Ediciones Acapulco.

Ésta será una librería ecléctica y barroca donde no vas a encontrar Inferno, de Dan Brown, u otros títulos de moda, pero sí muchos otros que quizá desconocías. Pienso que será un lugar donde puedas llegar sin expectativas, abiertos a la sorpresa, porque lo mismo hallarás un libro que te encante y que puedas adquirir, u otro que podrás hojear para descubrir algo nuevo”.

¿Será librería especializada?, se le cuestiona a la editora. “En realidad habrá libros tanto para el coleccionista como para el lector casual. Abriremos con una muy buena selección de literatura mexicana y universal, donde destacarán las primeras ediciones de Octavio Paz, Sergio Pitol, Julio Cortázar, Jorge Luis Borges y una primera edición autografiada de Nostalgia de la muerte, de Xavier Villaurrutia”. También venderemos libros de Dr. Atl y el movimiento estridentista, entre otros libros raros en la historia del arte y la literatura mexicana; primeras ediciones ilustradas por Miguel Covarrubias, Daniel Fernández Ledesma y Francisco Díaz de León, y una selección con grabados de Posada y una colección de códices mexicanos reproducidos. Tendremos los ensayos de Salvador Novo, las primeras ediciones de Panchito Chapopote, de Xavier Icaza, y de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, ilustraciones de Diego Rivera y la colección completa de la Biblioteca del niño mexicano, de Heriberto Frías, con portadas litográficas de Posada, empastadas en piel, y la colección Héroes del diseño, del propio Alejandro Magallanes, abunda. Selva Hernández, quien también administra la librería de viejo A través del Espejo, acepta que en años recientes han abierto pocas librerías y eso tiene una explicación simple: “Porque una librería no es un negocio tan rentable como una cafetería… pero, ni modo, esto es lo que nos gusta y no haríamos otra cosa”. ¿No es mejor abrir una librería digital donde se vendan estos títulos? “La lectura electrónica es práctica, barata y útil, pero no podemos superar el placer de sostener un libro, olerlo… eso es mejor que pasar el dedo sobre una pantalla. Pienso que un libro despierta una multiplicidad de sensaciones que difícilmente serán replicadas con una tablet y ésa es la idea que nos tiene aquí a punto de abrir La Increíble Librería”, concluye.