Los visitantes al encuentro librero solicitaron títulos sobre el líder revolucionario, pero los sellos editoriales iban poco preparados GUADALAJARA. Tres horas habían pasado desde que la Feria Internacional del
Tres horas habían pasado desde que la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) abrió sus puertas, cuando algunos curiosos ya preguntaban por los libros sobre Fidel Castro entre los estands de editoriales como Planeta, Penguin House Mondadori, Océano, el Colegio Nacional y el Fondo de Cultura Económica (FCE). Así lo confirmó ayer Excélsiordurante un recorrido por estos espacios libreros, donde una centena de curiosos buscaba algún ejemplar sobre el político y dictador cubano.
—Oiga, ¿tienen libros de Fidel Castro?, preguntaba un joven de rastas y barba rizada en forma de triángulo a uno de los vendedores. —No joven, fíjese que no traemos… no veníamos preparados para esto. Pero en el otro pasillo creo que sí traen algunos -respondía un vendedor del FCE. Tras un recorrido de media hora, el mismo joven de rastas dio con la editorial Miguel Ángel Porrúa. —Oiga, ¿Tiene libros de Fidel? —¿De quién?, respondió el vendedor. —Pues de mi comandante… de Fidel Castro. —¡Claro que sí!, tenemos dos. Entonces le mostró dos títulos: De Cristóbal Colón a Fidel Castro y Cuba, la isla fascinante, ambos del narrador y expresidente de República Dominicana, Juan Bosch. —Y los dos están buenos, eh porque son nuevas ediciones –aseguró el vendedor como si se tratara de un queso fino. —OK camarada, deme los dos– pidió Francisco Galván, un hombre de 32 años que alguna vez fuera universitario –así lo dice– en las aulas de la Universidad de Guadalajara para convertirse en artista visual, pero ahora ha encontrado su camino como autodidacta. —Camarada, tú me preguntas para qué me llevo estos libros. Esto es simple: quiero estudiar y recordar al glorioso, a mi Comandante, al viejo que le hizo frente a esos gringos que hoy nos hostigan... Es pertinente y, digan lo que digan, este viejo ya hizo historia -explica orgulloso, con sus libros en la mano, antes de ir a la conferencia donde Mario Vargas Llosa abriría el Programa Literario de América LatinaAhora voy a ver qué dice ese cabrón de derechas”, remataba el joven mientras acomodaba sus rastas.Para ese momento, el sello Miguel Ángel Porrúa ya había vendido 37 ejemplares de ambos libros. A quince metros de ahí la editorial Paidós ofertaba sus propios títulos: Yo fui la espía que amó al comandante. Una vida de película, de Marita Lorenz; La vida oculta de Fidel Castro, escrito por Juan Reinaldo Sánchez, el exguarura de Castro, quien desde la portada promete revelar los secretos del político y dictador cubano; y El engaño populista, de Axel Kaiser, donde se abordan las figuras de Castro, Hugo Chávez, Cristina Fernández de Kirchner y Evo Morales. Estos ejemplares no habían corrido con tanta suerte, pero hasta ese momento ya habían vendido 12 libros de los tres títulos. “Aún no hemos vendido lo esperado, pero mi experiencia nos dice que entre la noche de hoy y la tarde de mañana venderemos muchos más”, dijo el vendedor.