• El escritor español Javier Marías celebra mañana su cumpleaños como un referente de la literatura

MADRID.

Mañana Javier Marías cumple 65 años y lo hace consolidado en una de las figuras literarias más exitosas de España. Observador de la realidad que lo rodea, fiel a sus principios y convicciones y, sobre todo, dedicado con pasión a la Literatura con mayúsculas.

Ni recibe premios gubernamentales, ni utiliza las nuevas tecnologías para escribir. Javier Marías es fiel por principios a sí mismo. Así lo demostró en el año 2012, cuando rechazó el Premio Nacional de Literatura que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte le había concedido por su novela Los enamoramientos. Aceptarlo, dijo entonces, habría sido “una sinvergonzonería”. Marías llevaba años advirtiendo que no quería premios oficiales. “Creo que el Estado no tiene por qué dar nada a un escritor. Dado que ésa es mi norma, si alguna vez se me ofreciera algún premio de los que llamamos estatales u oficiales, pues no lo aceptaría”, había dicho en alguna ocasión cuando su nombre suena para galardones como el Cervantes. Tampoco quiere recibirlos, cuenta, porque si su padre no los tuvo él tampoco debe aceptarlos. Marías nació en Madrid el 20 de septiembre de 1951 y es hijo de la escritora Dolores Franco y del filósofo y también escritor Julián Marías, fallecido en 2005. Su padre, republicano acérrimo, fue encarcelado y represaliado por el franquismo y, al no poder ejercer como profesor en España, dio clases en varias universidades de Estados Unidos, donde Javier Marías vivió parte de su infancia. Con una sólida formación literaria, estudió Filosofía y Letras en la Universidad Complutense de Madrid. Cuando en 1971 publicó su primera novela, Los dominios del lobo, jamás pensaba que sería escritor. En una reciente entrevista recordaba cómo a los 19, estando en la universidad, no se planteaba para nada ser escritor y había escrito su primer libro porque tenía costumbre de escribir cosas desde niño. “Nunca pensé que sería escritor. Ni siquiera sabía si iba a escribir otra novela”, dijo. Pero un año después escribió Travesía del horizonte (1972) y en 1978 llegó El monarca del tiempo (1978); en 1986 El hombre sentimental, ganadora del Premio Herralde de ese año. Se veía así atrapado en una vida de letras que lo ha llevado a escribir decenas de novelas, libros de ensayo y de relatos, así como traducciones. Entre 1983 y 1985 Marías impartió clases de Literatura Española y Teoría de la Traducción en la Universidad de Oxford. También ha sido profesor en el Wellesley College y en la Universidad Complutense de Madrid. Desde el año 2006 es miembro de la Real Academia Española, donde ocupa el sillón con la letra R. En una reciente entrevista, el escritor contaba que le preocupa “la falta de estima de los jóvenes y de no pocos mayores por el más largo periodo de libertad y democracia que hemos tenido”. “Con todos los peros que se deban poner es un periodo muy bueno, y me preocupa esa falta de estima y, no digamos, el deseo de algunos de dar por terminado este tiempo”.