• Nació el 11 de agosto de 1933 y fallece el 18 de julio del 2015 en la cabecera municipal de Los Cabos; su familia y algunos funcionarios de su administración, estuvieron presentes en el evento San José del Cabo, Baj
• Nació el 11 de agosto de 1933 y fallece el 18 de julio del 2015 en la cabecera municipal de Los Cabos; su familia y algunos funcionarios de su administración, estuvieron presentes en el eventoSan José del Cabo, Baja California Sur.- A 63 años de su nacimiento, el XII Ayuntamiento de Los Cabos, rindió homenaje póstumo a Héctor Palacios Avilés, quien fungió como el primer presidente municipal durante el trienio 1981 – 1983. Durante el evento en el que estuvieron presentes familiares del finado profesor Palacios, Arturo de la Rosa Escalante, presidente municipal de Los Cabos, recordó que inmediatamente después de que el Congreso aprobara las reformas constitucionales que dieron vida legal al ayuntamiento cabeño, lo que ocurrió el 8 de abril de 1980, fue que tomó esta responsabilidad. Manifestó que la creación del municipio de Los Cabos no fue obra de la casualidad, sino el resultado de la evolución y el desarrollo de esta región y producto del trabajo de muchos cabeños que desde distintas trincheras actuaron para que se reconociera la capacidad de autodeterminación y la mayoría de los ciudadanos y organizaciones de Los Cabos, que buscaron se atendieran los reclamos para que se contara con instituciones de gobierno acordes al nivel de desarrollo y a las expectativas de mejoramiento que se preveían para acceder a mejor bienestar y justicia. “Dentro de este grupo de notables cabeños preocupados por la política, el gobierno y la sociedad, estuvo el profesor Héctor Palacios Avilés, quien después de su profesión como docente, encontró en el servicio público una de las mejores formas de realización de sus ideas y anhelos, por eso, por su activismo social y político, ocupó primero el cargo de delegado municipal de San José del Cabo y después como secretario general municipal del ayuntamiento de La Paz, cuando este territorio de Los Cabos formaba parte de aquel municipio”, puntualizó. Dijo, ya fue como alcalde que al profesor Palacios le correspondió sentar las bases institucionales y reglamentarias para regular la vida y las actividades en el nuevo municipio, en aquella época prometedora, donde se vivía en un auge económico por el inicio de la industria hotelera, de comunicaciones y de servicios y que ahora, después de cuatro décadas, han encontrado en Los Cabos uno de los mejores destinos nacionales e internacionales. “Polémico por naturaleza, al profesor le corresondió sacar la casta como hombre de partido, encabezando luchas por la democratización de los procesos selectivos y secundando movimientos nacionales reivindicatorios, su paso por el I Ayuntamiento de Los Cabos, así como por la vida como un ciudadano entregado a su tierra y su gente no fue desapercibido y por ello, obtuvo en su gestión reconocimientos nacionales por su desempeño entregado por la más alta magistratura del país, en toda su vida luchó y ganó importantes batallas y obtuvo cargos públicos estatales y federales, pero también lo más importante fue que se ganó a su gente, a sus paisanos que lo recuerdan con afecto y cariño, por sus años como gobernante municipal y porque nunca perdió el contacto de sencillez y solidaridad con ellos”, destacó. Por todo lo anterior, aseveró la importancia del homenaje a quien calificó como un forjador del municipio de Los Cabos, que merece ser ampliamente conocido y reconocido por las presentes y futuras generaciones, especialmente por la niñez y la juventud como ejemplo a seguir como hombre de ideas y acciones que promovió a favor de su amada tierra donde nació y donde descansan sus retos mortales. Por su parte, Oscar Manríquez, director de Catastro en Los Cabos y nieto del homenajeado, reconoció que su abuelo desempeñó muchos cargos dentro de la administración pública municipal, los más sobresaliente como delegado municipal, secretario general y presidente municipal, de todos es conocido militante del PRI e impulsor de procesos democráticos internos de su partido, pero sobre todo, un hombre que creyó en la fortaleza de las instituciones públicas y de la libertad y compromiso de sus funcionarios para servir a todas y todos los ciudadanos sin distinción alguna, sin importar su ideología política o religiosa. “Con mucha satisfacción les digo que su gobierno municipal se caracterizó por ser transparente en sus acciones y productivo en el quehacer político diario, a tal grado que el entonces presidente de la República, José López Portillo, le otorgó en Los Pinos como uno de los mejores alcaldes de los municipios turísticos de México, por todo ello, Ninfa Montaño de Palacios, mi abuela, de mis tías y tíos aquí presentes, entre otros, agradecerle al alcalde y al cabildo honrar la memoria de quien gobernó con humildad y transparencia y dio todo por enaltecer este municipio de Los Cabos, descansa en paz abuelo y donde quiera que estés aquí todos te recordamos cariñosamente y así será por siempre”, concluyó.
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