• Los dictámenes presentados por la SEP para denostar el inmueble son "estériles y mentirosos" • Pide MORENA al gobierno del estado mantenga en servicio la Casa del Estudiante; En pronunciamiento presentado en la sesión de la Comisión Permanente la representante popular pidió que sean revisadas las condiciones actuales del inmueble que alberga a más de 70 estudiantes en lo relacionado con su infraestructura y equipamiento

Alan Flores Ramos / Redacción La Paz, Baja California Sur.- Mientras la diputada local Guadalupe Rojas Moreno (Morena) se pronunció en contra de las acciones que emprende la Secretaría de Educación Pública (SEP), después de determinar que la Casa del Estudiante Sudcaliforniano "no reúne las condiciones" para continuar su funcionamiento, exalumnos de la misma se manifestaron en el Congreso del Estado solicitando la rehabilitación y la no desaparición de lo que consideran un espacio necesario para estudiantes locales de escasos recursos. El consejero de finanzas de CadizBCS A.C., asociación civil que agrupa a integrantes y ex integrantes de la Casa del Estudiante Sudcaliforniano desde hace más de 20 años, entre los que se cuentan a más de 100 miembros, manifestó que el secretario de Educación Pública "está mal informado" sobre las condiciones que guarda la casa ubicada en la delegación Iztapalapa y que alberga a más de 70 jóvenes de la media península que estudian el nivel superior en la capital. "Está mal informado, ha manejado una serie de declaraciones en cuanto a los dictámenes que tiene, nosotros los calificamos de irrelevantes en el sentido de que parten de una mentira, la casa no tiene 40 años, la construcción que está ahí es una casa reciente, esa edificación data de 1986, entonces 40 años todavía no los cumple. Supongo que los maneja por la calidad de los materiales, porque quieren demostrar que la casa no sirve y se tiene que tumbar", dijo el representante de la organización. Es por esto que aseguró que la organización se trasladó en fechas recientes a la Ciudad de México para solidarizarse con los estudiantes que ahí radican, así como darles el mensaje de "no creer" a los dictámenes que fueron solicitados a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en los que se manifiesta que dicho inmueble ya no cuenta con los requisitos mínimos para operar y representa un riesgo permanente por la zona sísmica que comprende la Ciudad de México. "El gobierno no ha hecho el mantenimiento de un inmueble de ese nivel, son 2 mil 500 metros cuadrados de construcción y no ha hecho el mantenimiento, el mismo está diciendo que ya no lo hizo, y no lo va a hacer, está amenazando con ese asunto, lo cual es muy riesgoso porque está, no somos nosotros que nos vamos a defender, es él el que tiene la responsabilidad de reintegrar ese inmueble y hacerlo integro con un mantenimiento adecuado", consideró el manifestante. Es por esto que cuestionaron al gobernador Carlos Mendoza Davis por denostar el inmueble que fuera defendido por en la administración de su padre, Ángel César Mendoza Arámburo, después de que la Presidencia de la República quisiera "tumbarla" en 1978; calificó de incongruente la postura de cerrar los espacios educativos de la forma en que Héctor Jiménez Márquez ha "operado", ya que al igual que con la Escuela Primaria 18 de Marzo, los exalumnos sospechan de una posible intención mercantil. "Es una incongruencia que el papá haya sostenido la casa y su hijo quiera cerrarla. Entonces estamos obviamente en contra, siempre en contra que un espacio educativo, de asistencia para jóvenes con escasos recursos como fuimos en su tiempo nosotros se vaya a cerrar. Yo siento que hay una venta de por medio, un interés por parte de deshacerse de los bienes inmuebles que causan problemas en el sentido del mantenimiento", finalizó el representante de CádizBCS A.C. • Pide MORENA al gobierno del estado mantenga en servicio la Casa del Estudiante Por su parte la Diputada del Movimiento de Regeneración Nacional, Guadalupe Rojas Moreno hizo un llamado al Gobernador del Estado, Carlos Mendoza Davis y al Secretario de Educación Pública, Héctor Jiménez Márquez a que trabajen en la remodelación de la Casa del Estudiante en la Ciudad de México “concluyendo el proyecto que hace 30 años está pendiente, que se respete la independencia y el autogobierno de quienes forman parte de dicho espacio” y solicitando que no se cierre este espacio que ha servido a varias generaciones de sudcalifornianos para cursar estudios superiores en la capital del país. En pronunciamiento presentado en la sesión de la Comisión Permanente la representante popular pidió que sean revisadas las condiciones actuales del inmueble que alberga a más de 70 estudiantes en lo relacionado con su infraestructura y equipamiento, “garantizando que mediante una ampliación presupuestal, los estudiantes reciban mes con mes el equivalente a 5 mil pesos por cada estudiante”, solicitando que la responsabilidad y el respeto por los espacios de beneficio popular “sustituyan los fríos análisis mercantilistas, que pretenden justificarse aduciendo la seguridad de quienes ahí habitan”. Destacó que hoy un estudiante recibe mensualmente mil 958 pesos para su alimentación y pago de servicios como energía eléctrica y agua potable, así como el pago de dos trabajadores de la cocina, destacando que en el ejercicio de 2015 se ejercieron 2.6 millones contra 1.4 millones para el presente 2016, 42 por ciento menor. Pidió la Diputada de Morena que se termine con la campaña de desinformación que alrededor de este tema ha generado el gobierno estatal, que dijo pretende desacreditar a los estudiantes a fin de estigmatizarlos socialmente y con estos argumentos proceder a cerrar la Casa del Estudiante. Guadalupe Rojas puntualizó que un dictamen presentado en el año de 2014 por la Secretaría de Protección Civil de la Ciudad de México “estableció que las condiciones del inmueble eran de bajo riesgo, requiriendo medidas de mantenimiento correctivo y preventivo, sustitución y confinamiento de instalaciones eléctricas, monitoreo constante de celdas de cimentación y mitigación del riesgo, responsabilizando al propietario de su falta”. Recordó al hacer uso de la tribuna que cuando en el gobierno de José López Portillo en el año de 1978 se cerraron la mayor parte de las casas del estudiante que mantenían los gobiernos estatales en la capital, “en el caso de la Casa del Estudiante Sudcaliforniano, el gobernador Ángel César Mendoza asume su consentimiento evitando de ese modo su desaparición. La lejanía y el aislamiento de nuestra entidad con respecto a la capital de la República la hacían indispensable por lado, y las condiciones políticas locales derivadas de la reciente transformación de Territorio a Estado, facilitaron que la medida fuera tolerada por el poder central”, sostuvo Rojas Moreno. Indicó que en 1981 se adquirió un terreno para construir un inmueble acorde a las necesidades de crecimiento ante la demanda existente por parte de los estudiantes sudcalifornianos cada ciclo escolar, contemplando la nueva edificación en la calle de La Viga un total de 48 cuartos, cocina, comedor, biblioteca y canchas, pero el proyecto se detuvo hacia el año de 1986 presentándose una serie de problemas al no canalizarse una mayor inversión en la Casa, careciendo de instalaciones eléctricas e hidro sanitarias inadecuadas, por lo que no podía ser habitada. Señaló que a partir de los sismos de 1985, y ante la falta de continuidad en la conclusión de la obra, la asamblea de quienes integraban la Casa “decidió trasladarse a la nueva sede en 1986, misma que luego de su ocupación tuvo adecuaciones para hacerla habitable, atendiendo las necesidades primarias, sin que hasta la fecha se haya asumido el impulso económico definitivo del parte del Gobierno del Estado.

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