• El gobernador Héctor Astudillo reitera que los tiroteos fueron respuesta a la detención de un criminal

CHILPANCINGO, GUERRERO.- El gobernador, Héctor Astudillo Flores, informó que ante la psicosis generada tras las balaceras de ayer en Acapulco, al menos 100 de 155 escuelas vigiladas por agentes estatales y federales suspendieron clases.

En conferencia de prensa, reiteró que los tiroteos, que dejaron saldo de un agresor muerto, son respuesta de la delincuencia organizada a la detención del presunto criminal Fredy del Valle Berdel. Tras una reunión de emergencia con el Grupo de Coordinación Guerrero (GCG) —en el que participa el Ejército, la Marina, la Policía Federal, la Fuerza Estatal y la Policía Municipal— el mandatario precisó que hubo dos eventos: En Caleta, alrededor del hotel Alba Suites y entre Costera 125, donde está la oficina de la Policía Federal y el hotel Costa del Sol. No hubo ataques, según Astudillo, como circuló en redes sociales y hubo una organización previa. Aseguró que las corporaciones estaban preparadas para la respuesta de la delincuencia ante la detención de Del Valle, ubicado como el ex jefe de sicarios del Cártel Independiente de Acapulco (CIDA), y consideró que hubo una campaña en redes sociales para sobredimensionar los hechos; incluso, hubo llamadas precisando ataques en diferentes colonias que no pudieron corroborar. “En Acapulco ha habido hechos más fuertes que han causado dolor en familias, en esta ocasión el de ayer fue aparatoso, con mucha información que no era la realidad derivado de la balaceras, pero ha habido otros acontecimientos más fuertes que han causado bajas, dolor a familias, éste tuvo un efecto especial porque en dos lugares específicos se accionaron armas de fuego”, dijo. De acuerdo con el reporte de la Policía Federal, entre las 21:53 y 22:55 horas ocurrieron las confrontaciones entre pistoleros y efectivos del Ejército, la Policía Federal y la Policía Municipal que participaron en el operativo. Luego de las balaceras confiscaron vehículos y en uno de ellos 52 sobres con cantidades menores a dos mil pesos; “aparenta ser una nómina que entendemos se estaba pagando en esos momentos, esa noche”. Acompañado por el alcalde perredista Velázquez Aguirre y quien anunció Astudillo participará en las reuniones del GCG en lo posterior, el fiscal General del Estado, Javier Olea Peláez, mandos del Ejército y la Marina, dijo que los reportes de balaceras en al menos 10 puntos de Acapulco “ha sido muy difícil comprobar; las que sí son verídicas son las que están cerca del Suite Alba (Caleta), y en la Costera entre el hotel Costa del Sol y Costera 125: no hay ni un solo impacto en la oficina”. El gobernador insistió que hubo una campaña en redes sociales para generar sicosis; por ejemplo, hubo quien subió fotografías de una persona asesinada dentro de una tienda de auto servicios, lo que no ocurrió ayer; eventos del 2009 como el choque de un carro militar contra otro vehículo; mensajes de toques de queda, y advertencias a la población de no salir de sus casas. Aún con lo que dijo, la costera lució vacía esta mañana.

“Hay normalidad, les pido a ustedes que nos ayuden a volver a la normalidad, que la gente vuelva a clases; el transporte está funcionando con normalidad… si los delincuentes están decididos a todo, el gobierno está decidido a enfrentarlos con toda la determinación”, enfatizó Astudillo y convocó a la ciudadanía a regresar a sus actividades.

En otras entrevistas Astudillo habló de modificar la estrategia de seguridad con permanente presencia de las fuerzas federales; mientras que en la conferencia en Guerrero adelantó que podría solicitar más elementos para hacerle frente a la delincuencia. En Acapulco, de acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública, a la fecha han ocurrido 331 homicidios; es considerada por la Secretaría de Gobernación (Segob), la ciudad con mayor tasa de mortalidad.