• Exploraciones Oceanicas S.A. de C.V. busca autorizaciones ante Semarnat La Paz, Baja California Sur.- El delegado estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Saúl Colín Ortiz, aseguró que
• Exploraciones Oceanicas S.A. de C.V. busca autorizaciones ante SemarnatLa Paz, Baja California Sur.- El delegado estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Saúl Colín Ortiz, aseguró que la empresa Exploraciones Oceánicas S de R.L., que promueve el primer proyecto de minería submarina en México denominado “Don Diego” en Baja California Sur, no ha iniciado operaciones, ya que actualmente se encuentra en búsqueda de los permisos correspondientes como la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Por otra parte, el delegado explicó que la empresa Exploraciones Oceánicas S. de R.L. recibió autorización por parte de la dependencia federal para llevar a cabo actividades de exploración y reconocimiento del lugar para poder determinar la viabilidad del proyecto y posteriormente iniciar las gestiones para obtener la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), misma que se encuentra en trámite. “La Profepa llevó a cabo una inspección en su momento y la empresa acreditó que llevó a cabo las gestiones necesarias ante Semarnat para esas actividades […] pero el proyecto no ha iniciado ninguna actividad de operación, entonces también se mantiene como un proyecto y entiendo que están en esa etapa de obtener las gestiones necesarias ante Semarnat y otras dependencias para poder obtener las autorizaciones correspondientes”, indicó Saúl Colín. El proyecto Don Diego busca obtener 350 millones de toneladas de fosfato mediante el dragado de 91 mil hectáreas de fondo marino en el Golfo de Ulloa, en el municipio de Comondú, en una zona que ha sido identificada como parte del Área de Refugio para la Protección de Tortuga Amarilla (Caretta caretta); al respecto, Profepa indicó que Semarnat es quien deberá determinar el verdadero impacto de este proyecto y determinar si es viable o no para llevarse a cabo. “Mira pues, evidentemente que una actividad como esta tiene impactos en el ecosistema, sin embargo, es la Manifestación de Impacto Ambiental la que prevé todas estas situaciones, todos estos impactos que se generan a lugar y quien evalúa finalmente es la Semarnat. A Profepa le corresponde verificar que cuenten en su momento con las autorizaciones correspondientes”, finalizó el delegado.
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