La Paz, Baja California Sur.-De detenciones ni hablamos… ese es el panorama que se vive en la ciudad capital con los resultados de la Policía Ministerial que ahora está a cargo de Bibiano Burgoin García. Durante los últimos acontecimientos violentos en la ciudad capital, así como en otras zonas del Estado como Las Pocitas o Ciudad Constitución jamás se ha dado a conocer sobre detenciones o seguimiento de estas. Sabemos que el Nuevo Sistema de Justicia Penal pone sobre la mesa de las corporaciones una gama de restricciones al momento de dar información a los medios, pero tampoco se trata de ocultar datos relevantes. A partir de Febrero, y luego de una pausa de poco más de dos meses, las balaceras y ejecuciones volvieron a detonarse en la ciudad capital, sin embargo, a pesar de movilizaciones jamás hay detenidos ni se rinden cuentas sobre estos asesinatos. Y si las hay jamás son notificadas con la relación exacta a estos acontecimientos, puesto que probablemente la Policía Ministerial vive en estos momentos un hermetismo y exclusión de los medios de comunicación que no se había visto en años. Juan Carlos Jiménez Pérez, ex director de la Policía Ministerial llegó fue señalado y criticado por errores y aciertos que tuvo durante el tiempo que estuvo en frente de la corporación, sin embargo, uno de los puntos que ayudaban a la instancia era que este funcionario no bloqueó ni detuvo el flujo de la información que generaba la corporación que representaba. Para prueba está el hecho que durante el tiempo Adonai Carreón Estrada estuvo al frente de la Procuraduría, había canales de comunicación bien implementados para aquellos que cubrimos la fuente policiaca, lo que permitió un trato cordial entre autoridades y medios de comunicación, claro, sin jamás faltar a la responsabilidad de cuestionar las acciones y los resultados que llevaban a cabo la autoridades durante el periodo más violento que ha reportado el municipio de La Paz en su historia. Cada determinado tiempo, Carreón Estrada que dirigía el Grupo de Coordinación citaba a los medios para exponer las detenciones que se hacían con relación a la ola de asesinatos que denominados como ejecuciones. Sin embargo, eso se ha terminado, porque de detenciones ni hablamos, vaya, ni siquiera de cuestiones del fuero común, como resultados y operativos para contrarrestar el robo de vehículo, cuyas investigaciones recaen sobre la Policía Ministerial. Sin duda alguna, una de las decisiones que más le han cuestionado algunos medios de comunicación al procurador de Justicia del Estado, Erasmo Palemón Alamilla Villeda fue la designación de Bibiano Burgoin García como encargado del despacho de la Policía Ministerial. Tan sólo en esta semana, medios locales y nacionales hacían acusaciones en contra del funcionario por supuestos nexos con el crimen organizado, lo cual ha tambaleado una vez más a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Uno como reportero no puedo hablar de lo que no le consta; uno debe informar aquello que ve, desde la perspectiva en la que se encuentra y desde la preparación que ha tenido para ejecutar dicha enmienda. Lo que sí es evidente es que la mayoría de las corporaciones de seguridad, que en su momento han sido cuestionadas severamente por la misma situación, presentan problemas graves de comunicación con la ciudadanía. Señores, ocultar no es una estrategia que le convenga a ninguna de las vertientes que intervienen en esta sociedad, que lo único que demanda son respuestas para su propia tranquilidad.

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