Ciudad de México.- El presidente de Francia, François Hollande, no apoyó la recomendación lanzada en Marsella para que los judíos de la ciudad no lleven la kipá de forma provisional por seguridad, al calificar de "insoportable" que los franceses consideren necesario esconderse por su religión.

"Es insoportable que en nuestro país ciudadanos sean agredidos por su opción religiosa" y "puedan extraer la conclusión de que deberían esconderse", indicó el jefe del Estado.

El Consistorio israelí de Marsella había animado este martes a los judíos de la ciudad a quitarse temporalmente esa pequeña gorra ritual por seguridad, ante la agresión que un día antes sufrió un profesor que la llevaba. El agresor, un adolescente de 15 años que ha sido imputado por tentativa de asesinato terrorista, reivindicó actuar en nombre de Alá y del grupo yihadista Estado Islámico (EI) porque "el Ejército protege a los judíos".

"El laicismo es el derecho de cada uno de ejercer su fe en condiciones dignas" y de "poder circular libremente en el espacio público dentro de los límites fijados por la ley", dijo Hollande en declaraciones recogidas por la prensa.

El presidente del Consistorio, Zvi Ammar, subrayó el martes que su llamamiento no suponía ceder ante el terrorismo, sino que buscaba "preservar vidas humanas", porque no es posible poner un guardaespaldas por persona. Su petición provocó un encontrado debate en la comunidad judía de Francia, en la que el Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (CRIF), entre otros, estimó que esa recomendación no es "digna" y supone "darle la victoria a los yihadistas".