Un agente de la Patrulla Fronteriza y otros cuatro hombres fueron acusados, en Brownsville, Texas, de cargos de crimen organizado y homicidio contra un inmigrante hondureño. El agente fronterizo Joel Luna, de 30 años y quien durante los últimos seis años había estado asignado a un puesto de inspección en Hebbronville, Texas, fue detenido en noviembre pasado como sospechoso de la muerte de José Francisco Rodríguez Palacios Paz. El cuerpo decapitado del inmigrante hondureño fue hallado por un grupo de pescadores el 16 de marzo de 2015 en una playa de la Isla del Padre. Desde su detención, Luna había permanecido suspendido de la Patrulla Fronteriza, bajo licencia administrativa. Junto con el agente fronterizo fueron acusados también sus hermanos, Eduardo Luna Rodríguez, de 24 años; y Fernando Luna Rodríguez, de 35; así como además de Aarón Rodríguez Medellín, de 22; y Néstor Manuel Leal, de 18. "Estas acusaciones, así como todos los esfuerzos de aplicación de la ley, son esenciales para impedir que se desborde la violencia y muestran que no toleraremos la invasión de los cárteles en nuestra comunidad", dijo el procurador del Condado de Cameron Luis V. Sáenz, en un comunicado. De acuerdo con las autoridades, Rodríguez Palacios Paz fue asesinado en Edinburg, donde trabajó en una llantera. Los investigadores dijeron que el homicidio del inmigrante hondureño estaba relacionado con una operación internacional de tráfico de drogas. Agentes del sheriff del Condado de Cameron descubrieron en la casa de Luna en Hebbronville, una caja fuerte que contenía un kilogramo de cocaína, una cantidad no especificada de metanfetaminas y 89 mil dólares en efectivo, así como tres pistolas.