• Gabriela Jáuregui, Brenda Lozano, Alejandra Márquez y Luisa Reyes Retama exponen adelantos de los trabajos que realizan
Guadalajara.- En torno a la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara existe un
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Gabriela Jáuregui, Brenda Lozano, Alejandra Márquez y Luisa Reyes Retama exponen adelantos de los trabajos que realizan
Guadalajara.
- En torno a la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara existe un universo paralelo que se alimenta de letras. A menos de cinco kilómetros del espacio ferial, cuatro escritoras noveles (una de ellas más ligada al cine) hablaron de sus filias y fobias a la hora de escribir, y adelantaron el trabajo que realizan.
Escritoras hablan de sus filias y fobias en la FIL
“De todo el programa de la FIL ésta es la participación más chingona”, dijo Julio Trujillo, la voz masculina que participó en la mesa Mexicanas de 30 y pico, en la que Gabriela Jáuregui, Brenda Lozano, Alejandra Márquez y Luisa Reyes Retama extendieron fuera de Expo Guadalajara, los beneficios del encuentro editorial.
Reunidas por iniciativa de Tequila Herradura, las escritoras también se deslindaron en la mesa de los “templos sagrados” en la escritura. “No es tanto la historia sino cómo decir; me gusta mucho leer lo que se hace ahora, no Octavio Paz o ese tipo de cosas muy consagradas o muy templo”, dijo Lozano.
La escritora Mexicana quien leyó el primer capítulo de su novela en preparación, Lava, agregó: “me interesa mucho cómo se lee hoy, lo que se tiene que decir hoy, esa idea de la posteridad me da mucha hueva. “Una vez un amigo me preguntó ‘¿aparece la palabra celular en tu novela?’ Qué buena pregunta”.
Las autoras se confesaron de este tiempo, Lozano renegó de Pablo Neruda y Jáuregui afirmó que su obra en preparación habla del presente: como un grupo de mujeres, amigas, que van dejando atrás la estrecha relación que han forjado. “Me interesa hablar de lo que sucede en estos días, yo escribo con una mano y el músculo, sí es un músculo. A veces me duele la muñeca. Cómo no estar en ese momento presente, escribir es un viaje, pero también es estar en el presente, en esa incomodidad de la nalga derecha porque ya se durmió”.
No se reconocen, o al menos así lo justifico Reyes Retama, como integrantes de una generación: “yo no creo que haya una cuestión de generación”. Trujillo salió al quite y aseguró que si se busca un tipo de enlace generacional no hay y sí, porque están hablando de cosas que están pasando”.