• Cada año, decenas de obreros son traídos a Los Cabos bajo engaños y falsas promesas de mejorar su condición de vida, convirtiéndose así en mano de obra barata de las grandes y lujosas construcciones Christian González San José del Cabo, Baja California Sur.-‘‘Así como estás ya no me sirves para trabajar, que te parece si te doy una lana, te regreses a tu tierra y se acabó el problema’’. Fue la respuesta que le dio el ‘‘patrón’’ al señor José Francisco Valadez Bernabé, luego de sufrir un accidente laboral cuyas consecuencias han empezado a cobrarle fractura.

El otro rostro del sector de la construcción

Al igual que cientos de trabajadores de la construcción, el señor Valadez arribó a este destino turístico con la esperanza de encontrar una mejor calidad de vida, sin embargo, jamás imaginó que el anhelo por sacar adelante a su familia quedaría paralizado por las injusticias y abusos por parte de los responsables de la empresa por la que fue contratado. Relató que el pasado 3 de agosto, mientras se encontraba laborando, un pesado andamio cayó encima de su cabeza provocándole la inflamación de la misma, dolores y mareos. Aquel día, agregó, que al dar aviso a los encargados de la obra, únicamente fue llevado a la enfermería donde se le proporcionaron un par de pastillas para el dolor, y posteriormente fue obligado a reincorporara a sus labores. ‘‘Después del accidente que tuve me presenté en el Seguro Social para ver si me podían atender, pero me dijeron que no, ya que no aparecía dado de alta. Cuando regreso al trabajo le expuse al patrón que no contaba con seguro y me dijo que no le importaba, que tenía que pagar con horas extras el tiempo que me llevé en el seguro arreglando ese asunto’’. ‘‘Pasaron los días y la cara se me empezó a hinchar, como vieron que me empecé a poner un poco mal me tuvieron que llevar con un médico particular. Así seguí trabajando, cuando finalmente llevé unas hojas por riesgo de trabajo me las tiraron (los patrones), me dijeron que así como estaba ya no les servía para trabajar, que me daban una lana para que me regresara al lugar de donde vengo y que se acababa el problema’’ relató Para poder cobrar las incapacidades, agregó, que se vio obligado a demandar a la empresa denominada Mar Adentro Residencial S.A de C.V, y de esta forma ser dado de alta en el IMSS. ‘‘Cuando me aseguraron aparecí con un salario mucho menor al que me estaban pagando’’ Y continuó: ‘‘Fui a la Junta de Conciliación y Arbitraje, pero la licenciada que me atendió estaba de parte del patrón. Le dije que necesitaba cobrar las incapacidades porque ni para comer tenía y también ocupaba mandarle dinero a mi familia. Es hora de que no me han querido recibir las incapacidades en el trabajo’’ afirmó El obrero, continuó diciendo que a raíz del fuerte golpe que sufrió en la cabeza, por las noches el dolor se ha vuelto insoportable. Por si fuera poco, mencionó que al ser dado de baja en su trabajo, tuvo que entregar la vivienda donde se quedaba, pues le fue imposible seguir pagando el alquiler. ‘‘Ahorita paso las noches adentro de un carro, como quien dice ahí he estado viviendo este tiempo, el dueño de muy buena manera se ofreció mientras solucionó mi situación. Yo la verdad no quiero problemas con nadie, lo único que pido es que se me liquide conforme a la ley y se solucione esto lo más pronto posible para regresarme’’ concluyó

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