• La última esperanza del PRI es que surta efecto al impugnación en contra del PAN, a quien acusan de rebasar los topes de gastos de campaña.

Giovanny Carlos

La Paz, Baja California Sur.- Pese a perder las elecciones con claridad, el delegado nacional del Partido Revolucionarios Institucional (PRI) en Baja California Sur, Jorge Schiaffino Isunza, confirmó que los sudcalifornianos querían que Ricardo Barroso Agramont fuera el próximo gobernador del estado.

El PRI insiste que BCS quería a Barroso como gobernador

Por esta razón, Schiaffino Isunza confirmó que su partido presentará una impugnación en contra del gobernador electo del Partido Acción Nacional (PAN), Carlos Mendoza Davis, a quien se le acusa de “exceder los topes de gastos de campaña”, porque según los priístas, “fueron determinantes en el resultado de la votación”.

A esta impugnación, según el delegado, sumarán la intromisión del gobernador del estado, Marcos Covarrubias Villaseñor, la publicidad colocada en espectaculares con la leyenda “si voy bien no cambio”, y otra serie de imputaciones con las que pretenden que Ricardo Barroso gane una candidatura que perdió por casi 30 mil votos.

Pero el priísta fue más allá. Acusó al expresidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, que en su visita a La Paz “trajo el avión lleno de dinero” para la compra del voto, aunque esa acusación no quisieron agregarla a la impugnación.

Schiaffino Isunza dijo que Ricardo Barroso no pudo haber perdido, basando su comentario en que, cuando Barroso buscó ser senador, ganó a Carlos Mendoza en las elecciones -2012-, aunque no recordó que en ese entonces el PRI no tenía el desgaste y desaprobación ciudadana que se ha generado con Enrique Peña Nieto, mucho menos los sudcalifornianos habían sentido que el joven priísta legislara en contra de su pueblo con la aprobación de la homologación del IVA del 11 al 16 por ciento.

Sin embargo, el delegado nacional advirtió “fraude y chantaje” pese a que otros candidatos, identificados con el grupo político de Esthela Ponce Beltrán, aceptaron haber perdido las elecciones por el número de votos que recibieron los candidatos del PAN.

Finalmente, aceptando que no han podido comprobar que el PAN compró votos, realizó una persecución y amenazó a funcionarios de casillas, impugnarán el proceso electoral hasta que Ricardo Barroso sea declarado gobernador.

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