• Si a personas del mismo sexo por fin se les permite ser una familia ante la sociedad, el siguiente paso es el quitar trabas para la adopción

Pamela Padilla Soto

San José del Cabo, Baja California Sur.- “Estamos muy contentos, es un derecho que teníamos postergado desde hace mucho tiempo, la finalidad es precisamente que no se vulneren los derechos humanos de la comunidad LGBT, fue tardado, se debía dar desde hace mucho tiempo pero lo importante es que ya se dio, para que la gente que se quiera casar lo hagan sin ninguna traba”, declaró para El Independiente, José Raúl Pérez Aguilar, miembro del Colectivo de la Diversidad Sexual (CODISEX) Los Cabos, respecto a la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de amparar el matrimonio igualitario.

CODISEX Los Cabos aplaude decisión de la SCJN

Dijo que si bien este logro para la comunidad gay ya se había dado en el Distrito Federal y el estado de Coahuila, que ahora se legalice en todo el país es motivo de celebración y aseguró, el siguiente paso para los matrimonios igualitarios es que se quiten las trabas en cuanto a la adopción.

Advirtió que aunque mucha gente está en contra porque cuestionan la calidad moral de las personas del mismo sexo para criar un hijo, los menores de edad que crecen con parejas homosexuales regularmente lo hacen con una mentalidad más abierta y por consecuencia, viven con menos frustraciones.

“Creo que un niño que crece dentro de un matrimonio de personas con el mismo sexo crece con un criterio más amplio porque nos toca explicarles el mensaje de ser libres y hacer lo que quieran sin violentar la ley, creo en lo personal me ha tocado conocer matrimonios gays con hijos adoptivos y los niños son muy felices viviendo en un hogar con amor, alimentación y abrigo”, aseveró.

Además, aseguró, realmente el que un menor sea o no homosexual no se define por la familia con la que crece, sino que son tendencias que regularmente se traen marcadas de nacimiento.

“Al final de cuentas hay muchos niños que necesitan un hogar, no tienen el cariño, no tienen quien los mantenga y sería importante dar ese otro paso, porque si legalmente ya podemos ser una familia, lo correcto sería que si las personas pueden, desean o quieren ya pueden adoptar y poderle dar a un niño el amor y la calidez de un hogar”, sentenció.

Pérez Aguilar dijo en muchos casos la comunidad homosexual quisiera poder tener un hijo propio, sin embargo, no cuentan con las posibilidades económicas de rentar un vientre para poder hacerlo, por lo que si la adopción fuera una opción, muchos niños que no tienen un hogar, ni calidad de vida, podrían tenerla y no buscar refugio en el pandillerismo, las drogas o vivir en la calle.

Para concluir, compartió la estadística que de cada tres suicidios en niños, uno es causado por el temor a demostrar su tendencia sexual.

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