La muestra explora el año de residencia que ambos artistas vivieron en esa ciudad. Agencia La exposición Diego Rivera and Frida Kahlo in Detroit, que a partir de hoy y hasta el 12 de julio estará prese
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La exposición Diego Rivera and Frida Kahlo in Detroit, que a partir de hoy y hasta el 12 de julio estará presente en el Instituto de Artes de Detroit, Míchigan, “es la primera muestra que reflexiona sobre la estancia que ambos artistas tuvieron en esa ciudad estadunidense”, informó Mariana Sáinz Pacheco, subdirectora de Exposiciones Internacionales de la Coordinación Nacional de Artes Visuales (CNAV) del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
La exhibición explora el turbulento y altamente productivo año que los artistas mexicanos Diego Rivera (1886-1957) y Frida Kahlo (1907-1954) pasaron en Detroit, un punto de inflexión en la carrera de cada artista. En ese periodo, Rivera creó uno de sus ciclos de murales mejor logrados, Detroit Industry, los cuales siguen exhibiéndose en cuatro paredes de un patio, comentó la funcionaria.
“La exposición se compone de 69 piezas de Diego Rivera y Frida Kahlo, de diferentes técnicas artísticas como pintura, fresco, dibujo, gráfica y fotografía, provenientes de una serie de colecciones mexicanas, estadunidenses e inglesas, de instituciones culturales y de particulares”, mencionó Sáinz Pacheco.
La muestra contiene piezas de varias colecciones de Estados Unidos, Europa. Además de las colecciones mexicanas se presentarán 11 piezas provenientes de la Fundación Robert Brady (una pieza), del Museo Dolores Olmedo (seis piezas, más dos de un particular), de la colección Juan Coronel (tres piezas) y de Lily Levin (una pieza).
La exhibición busca mostrar el tiempo que la pareja pasó en Detroit, a través no solamente de las obras que realizaron durante ese viaje, sino otras previas y posteriores, para advertir la evolución en sus trabajos, precisó.
“También se puede ver que la estancia de Rivera y Kahlo en esa ciudad, de abril de 1932 a marzo de 1933, tuvo consecuencias en el arte que ambos realizaron después”, dijo.
La exposición, de acuerdo con Sáinz Pacheco, tiene la particularidad de su discurso curatorial que es precisamente la reflexión sobre el momento de Rivera y Kahlo en Detroit como un detonante de cambio en su quehacer artístico. “En el caso de Diego se dio un cambio en su arte, mientras Frida halló ahí la construcción de su figura artística”.
Es la unión de todas las piezas de la muestra lo que permitirá al público hacer una lectura particular, con el plus de que el Instituto de Artes de Detroit exhibirá ocho dibujos preparatorios de los murales, los cuales se restauraron y se limpiaron para ser vistos luego de más de 30 años, explicó.
Alrededor de esta muestra hay una serie de actividades, como lecturas de libros, una ópera (Frida), conciertos, proyecciones de cine y la edición de un catálogo alusivo.
“Es un intento de acercamiento de ambos institutos con la comunidad de origen mexicano que hoy en día vive en Detroit, buscando el aspecto identitario en esa gente”, comentó.
Junto con las piezas de arte, la exhibición será abundante en materiales relacionados con las condiciones económicas: la Depresión, la vida industrial de Detroit y de sus trabajadores, así como la controversia en torno a los murales Detroit Industry.