Gilberto Santisteban Flores

La Paz, Baja California Sur.- Hace un año del homicidio de quién en vida era el representante de los policías manifestantes del Ayuntamiento, Juan Antonio Salgado Burgoin, el causó conmoción en diversos espacios de comunicación, donde los ciudadanos mostraron su indignación ante el crimen.

Tras la lucha que comenzaría directamente en mayo del 2013, surgió una guerra de declaraciones y acusaciones por los integrantes del grupo de policías inconformes del Ayuntamiento en contra de las autoridades, las cuales siempre tuvieron a Juan Antonio como porta voz.

Los diversos encontronazos que tuvo Juan Antonio Salgado Burgoin, con algunos comandantes de Tránsito Municipal, así como con el ex director de la instancia, Noé López Ramírez, fueron los encabezados principales de los medios de comunicación durante meses.

Entre las últimas batallas que tuvieron contra el Ayuntamiento, se documentó la frustración que vivieron los policías manifestantes al intentar ponerse en huelga indefinida en las instalaciones del palacio municipal, sin embargo, fueron retirados a la fuerza por oficiales de Seguridad Pública.

20 días habían pasado desde que Juan Antonio Salgado Burgoin había sido destituido de su cargo como sub oficial, cuando el 21 de febrero del 2014 fue interceptado por un grupo de hombres armados quienes le dieron muerte acribillándolo cuando viajaba en compañía de su familia.

En medio de una ráfaga de aproximadamente 30 proyectiles de fuego, el ex sub oficial de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal, fue asesinado, en un atentado en la colonia Las Misiones alrededor de las 12:30 horas de ese viernes 21 de febrero.

Hoy en día Juan Antonio Salgado Burgoin permanece en la memoria de muchos, al igual que las interrogantes entorno a su homicidio.

Sobre la investigación que se ha hecho sobre este asesinato, se sabe que está a cargo de la Procuraduría General de Justicia, y que sólo los familiares han tenido acceso al expediente de las diligencias que se han realizado.

Sin embargo, algunos de los sueños de Juan Antonio no quedaron en el aire; sus compañeros continuaron trabajando en la búsqueda de regular los derechos que tienen los policías Municipales, lo que ha culminado en la creación de una asociación civil.

La Unión de Policía Preventivos Municipales (UPM), ya es una realidad, incluso el mismo Ayuntamiento ha establecido líneas de comunicación con este grupo, lo que dio como resultado que obtuvieran un terreno para construir el edificio de la organización.

A un año del asesinato de Burgoin quedan las preguntas en el aire, aunque por el momento, se puede observar que los movimientos que gestionó se han hecho tangibles, y que todavía hay quienes luchan, motivados por su recuerdo.

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