• Su hijo sufrió agresiones psicológicas, físicas y sexuales en la escuela ubicada en San José del Cabo, pues a pesar del trastorno que sufre, es perfectamente capaz de comunicarse y explicar lo que le pasa, por lo que cuando pidió ya no ir a la escuela, es que comenzó a contarle los maltratos de los que fue víctima

Pamela Padilla Soto

San José del Cabo, Baja California Sur.- “El profesor un día metió a mi hijo en el salón de gimnasia en una especie de túnel y me contó que lo tapó con una pelota grande por lo que mi hijo se estaba quedando sin poder respirar, también vio cómo han empujado a otros niños, los han tirado al piso, jalado el cabello, las orejas, a una niña con parálisis cerebral le metían la cuchara hasta la garganta para que se ahogara; hubo un par de reuniones con padres de familia y en una de ellas la directora se dedicó a desprestigiarme tanto que hubo papás que se pusieron en mi contra sin conocerme y son personas cuyos hijos han sido agredidos según lo que me cuenta mi hijo, pero por la situación tan tensa yo ya no me acerqué a la escuela más”, denunció una madre de familia de un niño especial que desde marzo dejó de asistir al Centro de Áreas Múltiples de Educación Especial “Dra. Margarita Gómez Palacio Muñóz”.

Niño con autismo fue maltratado en el CAM de educación especial

Recordó como su hijo, quien padece un trastorno leve de autismo, al salir de la escuela le hizo saber que ya no quería acudir más y al preguntarle por qué, le comentó que lo maltrataban los maestros y las asistentes, por lo que de inmediato se regresó a aclarar los hechos, los cuales negaron, al igual que la directora, quien además se comportó hostil y prepotente, pues dijo no creía en la palabra del niño.

Sin embargo, al darse cuenta de que otra madre de familia se encontraba en las instalaciones de la escuela ubicada en la colonia Magisterial, en San José del Cabo, por la misma razón, pues su hijo también con autismo, igualmente había sufrido maltratos de parte de los maestros y asistentes, con más razón se decidió en no dejar más a su hijo, pues tanto la directora como los maestros negaron lo sucedido.

Por la molestia que esto le provocó, decidió acudir ante la Coordinación Municipal de Derechos Humanos, quienes la enviaron a la oficina de Cabo San Lucas, al ser una extensión de la Comisión Estatal, donde la licenciada Claudia Gaxiola le levantó su queja.

En el inter de que interponía la queja e incluso se presentara ante la Subprocuraduría de Atención a la Mujer y al Menor (SAMM) a denunciar los hechos, al cuestionar más a su hijo, este añadió que la maestra Judith Velis en una ocasión que fue al baño y con otros compañeros se lanzaron papel sucio, le dio unas cachetadas, lo estrujó y le dijo menso y cochino e incluso en una ocasión en que fue al baño y dejó la puerta abierta, la asistente de nombre Mari, llamó a todos los niños a verlo y cuando salió le agarró y apretó los testículos diciéndole que era un sucio al dejar la puerta abierta.

“Resulta que la directora me comentó que las monitoras o asistentes de los maestros, son madres de familia solteras que por sus condiciones se ven orilladas a venir a trabajar aquí, lo que me indigna porque deberían ser profesionales, aunque qué se puede esperar cuando los propios maestros que se supone que tienen alguna formación para atender a niños especiales, los maltratan”, detalló.

Compartió con El Independiente que en el SAMM se citó a ella, a otra madre que había ido a poner una queja y a la directora, donde se acordó hacer reuniones y realizar una minuta de acuerdos que se diera a conocer los padres de familia, en la que se establecieron 17 puntos, básicamente de organización interna como el vigilar a los niños en los recesos para su seguridad y capacitar a los maestros, pero nunca sobre el maltrato por el que se había denunciado, al respecto sólo se dijo que se pensó en adquirir cámaras pero no había recursos suficientes.

Se enteró que Derechos Humanos acudió a la escuela especial a darles una plática a los maestros sobre los derechos de los niños y que Pablo Linares, supervisor de Educación Especial asistió a las juntas pero no tomó más acciones en el asunto; también hubo dos reuniones con padres de familia a las que la denunciante, por la tensa situación prefirió no acudir, pero en las que le contaron que la directora se la pasó desprestigiándola y pidiéndo a los padres no tomaran en cuenta lo que ella decía, porque estaba loca al igual que su hijo, porque ambos asistían al psiquiatra.

“Llevé al psiquiatra a mi niño y luego de atenderlo, sin mi presencia, salió para decirme que tenía que tomar cartas en el asunto y me dio una nota en donde puso que mi hijo había sido victima de negligencia psicológica, física y sexual y que en el tiempo que tenía atendiéndolo no tenía datos de mitomanías o alucinaciones, documento que extendí al Ministerio Público y con eso entable una demanda contra el profesor Rogelio Martínez Rubio, Judith Velis y las asistentes Abnery Amador y Mary, de quien nunca le quisieron informar su apellido”, sentenció.

Fue hace apenas dos semanas que la licenciada Gaxiola de Derechos Humanos la contactó para darle la respuesta del profesor Linares, con la que quedó insatisfecha, pues iba en el mismo sentido de hacer correcciones dentro de la operación de la escuela, pero no refería nada sobre maltrato, por lo que tiene un mes para responder de regreso, pues lo que como madre de familia busca es que se sancione a los maestros, asistentes y a la directora, para que esto no vuelva a ocurrir a ningún niño especial.

Este contenido ha sido publicado originalmente por diarioelindependiente.mx si está pensando en usarlo, debe considerar que está protegido por la Ley. Si lo cita, diga la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido, ojo AL PRINCIPIO DE LA NOTA. Atte. Diario El Independiente